Primer pulso de la campña entre ASAJA León y la cooperativa ACOR, al señalar la organización agraria que «si quieren molturar su remolacha en La Bañeza, que se pongan a la cola».ASAJA recuerda a la cooperativa ACOR y a la empresa AB Azucarera que la molturación a maquila de la remolacha contratada por ACOR en la fábrica de AB Azucarera en La Bañeza, anunciada en la prensa local por el presidente de la cooperativa Justino Medrano, «no está contemplada en el Acuerdo Marco Interprofesional vigente, por lo tanto carece de marco reglamentario».
En este contexto, ASAJA ha sido muy clara y destaca que «si quieren molturar su remolacha en La Bañeza, que se pongan a la cola». Por eso, exigirá que la recepción de la remolacha que produzcan las 1.236 hectáreas contratadas por ACOR en la provincia de León, se efectúe de forma que no interfiera en el funcionamiento de las entregas de los productores contratantes con AB Azucarera para la fábrica de La Bañeza, lo que implica que la recepción de la remolacha de ese colectivo se haga agrupada al final de la campaña.
Asimismo, ASAJA recuerda que la cooperativa ACOR no es firmante del Acuerdo Marco Interprofesional Remolachero, y que «no lo es porque nunca le ha interesado serlo, por lo tanto su propuesta tiene un mal encaje en la relación contractual que actualmente existe entre los productores de remolacha y la industria azucarera».
En este sentido, la organización agraria aclara que «otra cosa es llevar esta propuesta a la próxima campaña en la que el Acuerdo Marco Interprofesional dejará de estar vigente y las relaciones comerciales se regirán por uno nuevo que no ha empezado a negociarse».
Por otra parte, desde ASAJA se advierte de que la molturación a maquila, en un sector tan regulado y sensible como es el del azúcar, «puede ser una práctica que requiera el visto bueno de la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia».
(Fotos: Archivo)