UGAMA considera que es un pequeño paso lograr que algunas explotaciones ganaderas de bovino de Madrid solo tengan que realizar un chequeo anual en todos los animales que, por su edad, sean susceptibles de ser investigados, pero pide a la Administración regional que decida realizar solo la segunda prueba de tuberculosis bovina a las explotaciones con presencia de la enfermedad, independientemente de la prevalencia de la comarca en la que se encuentre, tal y como recoge el Programa Nacional de Erradicación de Tuberculosis Bovina presentado por España para el año 2014 que permite a la autoridad competente tomar la decisión de realizar 1 ó 2 saneamientos ganaderos al año en aquellas explotaciones que lleven calificados como T3 durante 3 años consecutivos.
Esta reducción de pruebas solicitado por esta organización agraria, supone un beneficio para el sector agrarios al disminuir los costes y el trabajo del ganadero y al permitir agilizar la comercialización del ganado, y un considerable ahorro de recursos económicos públicos, ha recordado UGAMA.
UGAMA pide a la Administración regional que decida exceptuar de la segunda prueba anual a los rebaños que lleven calificados como T3 más de tres años consecutivos y que reúna a las partes implicadas a fin de tratar de hallar soluciones al peor de los problemas con que se enfrenta la ganadería de Madrid.
Más controles a la fauna salvaje
Al mismo tiempo, UGAMA solicita una vía de comunicación urgente entre las partes implicadas que sirva para aclarar si los sistemas que ahora se están aplicando carecen de efectividad o no.
El tiempo nos da la razón de que las pruebas que se realizan son de dudosa fiabilidad, como es la llamada ganma-interferón, que produce una alta sensibilidad pero baja especificidad, y que la erradicación de la enfermedad a las que se refiere el Programa de Erradicación de tuberculosis, nos parece tarea imposible si nuestro ganado pastorea conjuntamente con la fauna salvaje, cada vez más numerosa, con zonas de especial intensidad, como puede ser las cabras montesas de la zona de la pedriza, con miles de ejemplares exentos de todo control sanitario