"Este hecho crearía una situación crítica para las explotaciones ganaderas y las zonas afectadas, puesto que las plantas ahora garantizan que se puedan gestionar correctamente los purines, así como la continuidad de las explotaciones", asegura UP.

    Esta modificación del sistema retributivo de la producción de energía afecta, en Cataluña, a unas 480 explotaciones de porcino y seis plantas de tratamiento de purines ubicadas en Alcarràs, Juneda (dos plantas), Miralcamp, l’Esquirol-Santa Maria de Corcó y en les Masies de Voltregà.

    En todo el Estado afecta a más de 2.000 explotaciones que gestionan sus excedentes en cuarenta plantas.

    Además de pedir al Gobierno que actúe, el sindicato ha pedido reunirse con todos los grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados para que trabajen con este objetivo.

×