A todo ello, se debe unir que el ganadero está "machacado" económicamente por los gastos, debido a los costes de producción y a la sequía producida durante muchos meses de 2011 y 2012, según el secretario autonómico de COAG.
En su opinión, "todo lo ganado" en seguridad animal y vegetal en los últimos 20 años ha sufrido un deceso debido a los recortes producidos en las administraciones -europeas, estatales y autonómicas- desde la crisis económica.
Juan Moreno considera "fundamental" tener "total garantía" en relación a la cabaña ganadera y a los cultivos; y ésta se ha visto perjudicada por los "importantes" tijeretazos, que "nunca deberían haberse producido".
Sin embargo, el máximo responsable de COAG en la comunidad no achaca el rebrote de la lengua azul a estos recortes, pues "siempre quedan reductos" que "aparecen" cuando la climatología es "propicia", como ha sucedido este año con las lluvias, humedades e inundaciones.
Tampoco cree que el rebrote de la enfermedad vaya a afectar a las ventas en vacuno u ovino extremeños de este año, pues recuerda que los focos están "localizados" en varios municipios y la lengua azul lleva mucho tiempo tratándose.
La enfermedad de la lengua azul, de la que hace 10 años se detectaron en España los serotipos 1, 2, 4 y 8, ha ido progresivamente remitiendo, con un notable descenso en el número de focos y demostrándose que la vacunación era un arma eficaz.
En verano de 2011, la vacunación pasó de ser obligatoria a voluntaria, pero los focos actuales han obligado a adoptar estas medidas.