La organización considera que la decisión del Ministerio de Agricultura ha agravado la situación y pone en peligro a 100.000 viticultores, 70.000 familias, 38.000 puestos de trabajo y 9 millones de jornales al año en Castilla-La Mancha.
Por eso, según señala en un comunicado, "pedimos ayudas económicas tal y como permite la Unión Europea para casos excepcionales".
Por estos y otros motivos desde UPA CLM "vamos a manifestarnos el día 29 de julio en Toledo, para pedirle a la ministra y a la consejera de Agricultura, ahora más que nunca, ¡destilación de crisis!. Animamos a que el día 29 la sociedad castellano-manchega se una a la protesta, por es es importante". Para ello, los interesados pueden ponerse en contacto lo antes posible con la organización.