En esta convocatoria se han introducido algunas novedades para mejorar la gestión de los fondos asignados a La Rioja, de acuerdo a las nuevas condiciones que establece el Real Decreto que regula esta medida.
Ha explicado que será necesario, para recibir las ayudas, presentar la factura y justificantes de pago de las acciones realizadas para el desarrollo de los planes.
En el caso de que estas labores hayan sido acometidas por el propio viticultor, la mano de obra se calculará de acuerdo a unos parámetros fijados por la Consejería de Agricultura.
La compensación por la pérdida de renta solo se concederá si el arranque de los viñedos en plena producción se lleva a cabo un mes después de la presentación del plan de reestructuración y reconversión.
Los planes que se presenten en esta convocatoria deben haber concluido antes del 31 de diciembre de 2015, ha detallado Del Río, quien ha añadido que el Consejo también ha autorizado hoy un gasto de 245.000 euros, la misma cantidad que el año anterior, para la convocatoria anual de subvenciones dirigidas a las tres Organizaciones Profesionales Agrarias (OPAs) que operan en el ámbito de la comunidad, como son ARAG-Asaja, UAGR y UPA.
Respaldo a la labor que realizan las OPAs
El portavoz ha destacado que la labor de coordinación con el sector que desarrollan las OPAS es "interesante" y se ha referido al papel que juegan.
Ha explicado que esta subvención, básicamente, se dedicará a la cobertura de los gastos corrientes y de funcionamiento de las entidades, derivados de las actividades realizadas en beneficio de los agricultores y ganaderos riojanos y cuyo objetivo coinciden con el del Gobierno de La Rioja.
También ha dicho que la Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente considera que servicios que se prestan en defensa del medio agrario riojano contribuyen, gracias a la intermediación de las OPAS entre la administración y los ciudadanos, a la correcta aplicación de las medidas y políticas que se ponen en práctica.
Entre esas tareas ha citado las de coordinación de actividades sindicales, la colaboración con las asociaciones del sector, el asesoramiento, ayuda, gestión y colaboración con los agricultores y ganaderos en procedimientos relacionados con la Administración; la organización de actividades de formación, información y dinamización y el seguimiento y difusión de políticas agrarias.