Agroseguro sigue sin ganar para disgustos. Tras reconocer que este año ya ha pagado más que todo el año pasado junto, las denuncias y críticas se le acumulan por su decisión de querer ahorrar hasta el último euros. Y en Extremadura su mayor pesadilla es la Unión de Extremadura, que mantiene un pulso con la entidad aseguradora por los golpes de calor de este verano que Agroseguro no reconoce y se niega a abonar.
Según la organización agraria, los daños producidos por los golpes de calor que se registró en Extremadura a mediados del mes de julio se valoran en 7 millones de €. Hay afectadas alrededor de 10.000 has de maíz y 1.000 has de tomates, con una pérdida de 25.000 toneladas de maíz y 35.700 toneladas de tomates.
La Unión de Extremadura insta a los agricultores a reclamar el pago y no descartan acudir a los tribunales
Estas pérdidas, recuerda la Unión, están aseguradas en su mayoría a través de los seguros agrarios en la entidad Agroseguro, «que se niega a indemnizar a estos productores negando los efectos negativos que tuvieron los 44 grados de temperatura en la polinización del maíz y en la podredumbre apical del tomate».
Igualmente , la Unión de Extremadura denuncia la connivencia de los componentes de la Comisión territorial de Seguros Agrarios de Extremadura con Agroseguro para evitar que esta tenga que hacer frente a las indemnizaciones correspondientes, una Comisión presidida por el Director General de Agricultura «que vela más por los intereses de Agroseguro que por los de los agricultores, como es su cometido», lamenta la organización agraria.
Por esto, desde La Unión de Extremadura, instan a todos los agricultores a exigir a Agroseguro la tasación de daños aunque ésta asegure que no son indemnizables, «ya que tenemos conocimiento de que sí se van a indemnizar en tomates y en maíz, si no lo hace de manera voluntaria, tendrán que ser los tribunales quienes diriman si estos daños son indemnizables o no, si 44 grados es golpe de calor o no lo es».