"La confirmación de ESB no tiene ningún significado para la seguridad alimenticia y es igual de fiable comer carne y beber leche como antes", señaló en un comunicado la agencia noruega.
Este caso llega justo cuando Estados Unidos ha confirmado oficialmente en los últimos días que en las próximas semanas empezará a reabrir progresivamente su mercado a las importaciones de carne de vacuno procedentes de la UE, empezando por Irlanda. El embargo se impuso en respuesta a la crisis de la encefalopatía espongiforme bovina (conocida como enfermedad de las ‘vacas locas’) en Europa y ha durado alrededor de 15 años.