Las denominaciones de origen de los vinos de Bullas, Jumilla y Yecla se han unido a un proyecto nacional para obtener la huella dactilar del vino, que será “una potente herramienta frente a falsificaciones de los vinos de la Región de Murcia”, según señaló el consejero de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Francisco Jódar.
El Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Alimentario (IMIDA), a través de la estación enológica de Jumilla, en coordinación con los consejos reguladores de las tres D.O. protegidas, es el encargado de recoger las muestras de vino y enviarlas a la Estación Enológica de Haro, donde se desarrolla en exclusiva este banco mundial, en colaboración con Bruker.
Desde que se puso en marcha el proyecto el año pasado, la Región de Murcia ha presentado un total de 110 muestras, que han sido analizadas empleando la resonancia magnética nuclear de protón (RMN-H1). Esta técnica de la huella dactilar del vino permite identificar, de forma simultánea, más de 50 compuestos que están presentes en el vino.
“Pertenecer a esta red permitirá al sector vitivinícola poder certificar sus vinos en origen y destino»
Con la identificación de cada uno de estos componentes se contribuye a configurar la denominadala huella dactilar del vino, es decir, un perfil único y característico para cada uno de los vinos, que se introduce en una base de datos que contiene muestras de otros vinos, lo que permite establecer semejanzas y diferencias. Además, ubica al vino analizado frente a las diferentes variedades, los distintos años y las diversas zonas de vinificación y países presentes en el banco de vinos. Mediante esta comparación se puede determinar con precisión el origen, la variedad y la añada de un vino.
Al respecto, el consejero Francisco Jódar dijo hoy en Jumilla, en un encuentro con los representantes de las tres denominaciones de origen de la Región, que “pertenecer a esta red permitirá al sector vitivinícola poder certificar sus vinos en origen y destino, con la seguridad de que el análisis y el resultado será el mismo en ambos países”.
“Va a ser un avance muy importante en la trazabilidad de las transacciones comerciales de vino. Una carta de presentación en cualquier mercado del mundo, que va a permitir controlar sabotajes, fraudes y falsificaciones de los caldos, con la seguridad que ello comporta para el sector”, añadió Jódar.
Los vinos aportados por la Región de Murcia han ayudado a reforzar el modelo de vinos de España en la base de datos de RMN internacional. Además, se ha generado un perfil en la base de datos que permite una muy buena identificación de la variedad Monastrell, funcionando actualmente su modelo con un 95 por ciento de fiabilidad, que podría aumentar hasta el cien por cien si se continúa analizando más vinos de esta variedad.