En su postura institucional ante esta política hidráukica, el Gobierno murciano señala que "las aguas del trasvase han situado al Levante español como una zona líder de la producción hortofrutícola europea, permitiendo la consolidación de una agricultura de exportación y el mantenimiento de 43 millones de árboles frutales. La construcción de este acueducto ha supuesto además el abastecimiento de agua para 2´5 millones de personas y la creación de más de 80.000 puestos de trabajo directos y 100.000 indirectos".
Asimismo, considera que "el trasvase ha dado lugar a la transformación agrícola del sureste español, pues ha sido un elemento de planificación para su desarrollo social y económico. Esta infraestructura simboliza además la cooperación entre territorios compartiendo recursos para conseguir logros globales, lo que hace de España un país más cohesionado".
De igual forma, finaliza que "el trasvase Tajo-Segura es un símbolo de solidaridad, empleo y crecimiento, ya que, casi la práctica totalidad de la producción de frutas y hortalizas cultivadas en las zonas del trasvase se destina al mercado internacional. Este trasvase es, en definitiva, una obra de planificación y progreso para el conjunto de España".