Un hombre de 64 años que había salido a cazar ha muerto ahogado el domingo 27 en una balsa de riego en Binaced (Huesca) cuando trataba de auxiliar a sus perros, caídos al agua en un lance de la cacería.
Según informa el Instituto Armado, la voz de alerta fue dada la tarde de este domingo a través de una llamada telefónica hecha para informar de que el cazador, que residía en Binaced desde hace pocos años, no había regresado a casa tras una jornada de caza.
Encontraron junto a la balsa de riego la escopeta yun chaleco y varios perros flotando en el agua
Fuentes municipales han informado a Efe que un grupo de vecinos que salieron en busca del cazador alertados por su esposa localizaron su vehículo en la partida rural de Ripoll, a unos 8 kilómetros de la población, y comprobaron que junta a la valla de protección de la balsa de riego había una escopeta y un chaleco de caza.
Además, pudieron observar la presencia de varios perros muertos flotando en el agua de la balsa.
Alertada la Guardia Civil, efectivos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (Geas) desplazados a la zona localizaron el cuerpo del desaparecido en el interior de la balsa de riego.
Al lugar se desplazaron también miembros del equipo de policía judicial de la Guardia Civil de Huesca, que barajan la hipótesis de que el cazador cayera al agua mientras trataba de auxiliar a sus perros o bien que se hubiera introducido directamente para ayudarles a salir a la orilla.
Las fuentes citadas han destacado que aunque la balsa está protegida por una valla perimetral, los perros pudieron encontrar un hueco mientras perseguían a una presa.
El cadáver del cazador fue trasladado sobre las 21.00 horas del mismo domingo al depósito de Huesca para serle practicada la autopsia, mientras la Guardia Civil desarrolla una investigación para poder esclarecer todas las causas de este caso.