: La realidad del sector de las berries mexicanas, sus retos y oportunidades, son las líneas maestras de la entrevista mantenida con el Director Gerente de la Asociación Nacional de Exportadores de Berries de México (Aneberries,) Ing. Juan José Flores García.
-¿Cuáles son los orígenes de la Asociación Aneberries?
– Aneberries inició actividades incluyentes a mediados del 2009, siendo su motivación la de establecer diálogo directo con las más grandes empresas exportadoras de berries del país con injerencia en varios estados de la República, al respecto de temas coincidentes, algunos de ellos obligatorios para industria (temas fitosanitarios y de inocuidad entre otros) buscando con ello soluciones integrantes e integrales como grupo establecido que permitieran actuar en consecuencia. Nuestra asociación nació con 16 asociados, se formaliza en 2010, tenemos siete años de vida, por tanto somos una asociación joven, y hoy tenemos 22 socios.
– ¿Cuáles son sus objetivos actualmente?
-Dos de los más importantes son mejorar las prácticas de inocuidad y elevar los estándares de inocuidad, para tener un producto de mayor calidad y seguro. Si habláramos de nuestros objetivos cuando nacimos, podríamos decir que era consolidar y proteger a la industria, de especializarla y darle valor agregado, pero hoy los más significativos son los comentados anteriormente. Establecer e implementar un esquema de diferenciación y blindaje para los socios activos dentro de la organización, el cual establezca bases mínimas en torno a la competitividad. Lograr el reconocimiento de nuestra Asociación como el organismo que integra a los protagonistas de una industria confiable y sustentable. Crecer y fortalecer a la membrecía, incluyendo a los protagonistas de valor de la industria de berries, así como establecer un orden de gobierno y una estructura profesional capaz y autónoma para cumplir con las expectativas y necesidades de los socios que conforman nuestra entidad. También queremos generar valor a la membrecía y desarrollar nuevos mercados como Oriente Medio, China y Rusia, por dar algunos ejemplos.
-¿Qué superficie y volumen de comercialización concentran en su entidad?
-La superficie de nuestros socios está en 25,000 hectáreas y en volumen tenemos 230,000 toneladas. Particularmente, nueve de nuestros asociados tienen producción en Jalisco, donde se siembran 6,500 hectáreas en la entidad, que es el principal productor de arándanos y frambuesas. En Michoacán, su fuerte es la fresa y la zarzamora.
– El sector de las berries mexicanas está en búsqueda de nuevos mercados; ¿se han planteado alcanzar el mercado de los Emiratos Árabes?
-Por supuesto, ya estamos ahí y uno de nuestros puntos principales en comercialización es la ciudad de Dubái. Medio Oriente se encuentra dentro de los mercados meta para los berries y como industria estamos conociendo cada vez mejor los requerimientos y requisitos para enviar nuestra fruta. Actualmente, estamos exportando a 32 países, siendo nuestro fuerte Estados Unidos y cuatro o cinco países de la Unión Europea; a los Emiratos Árabes hemos llegado a través de Holanda, así como a los mercados asiáticos.
-¿Tienen las frutillas mexicanas competencia por parte de otros países productores en los mercados internacionales?
-Con Estados Unidos nos complementamos la mayor parte del año; sin embargo, hay periodos en los que producimos al mismo tiempo. Lo mismo pasa con Europa y Marruecos. Nuestra producción compite con Chile, Argentina y Perú. Actualmente estamos creciendo en arándanos; quizá en volumen no seamos competidores, si comparamos con Chile que tiene más de 16,000 y 18,000 hectáreas, mientras que en México estamos en 4,000 ha, pero en calidad y sabor lo somos. En Estados Unidos no somos competidores, sino complementarios, aunque en algún momento sí que podemos coincidir en algunos meses del año, pero somos un país productor de berries que programa su producción y adapta a la demanda del mercado, para tener unas producciones complementarias a las norteamericanas. En el caso del arándano, Chile es nuestro mayor competidor; en frambuesa y zarzamora dejó de ser un competidor por los temas de logística de exportación.
-La producción mexicana de berries ¿ha tocado techo o puede seguir creciendo?
-Puede seguir creciendo; hemos estimado que se pueden alcanzar 50,000 hectáreas. No sé si eso será el techo, pero sabemos que sigue creciendo el consumo y la aceptación de los berries en el mundo, y México sigue diversificando. México es un país atractivo y con recursos para soportar el crecimiento. También creemos que un porcentaje de la producción de otros países se trasladará a nuestro país en los próximos años.
-¿Hay capital extranjero norteamericano, europeo o asiático que haya invertido en el sector de las berries mexicanas?
-Sí, capital norteamericano y chileno. Se desconoce si existe inversión europea, aunque Planasa/Planamerica tiene capital español y asiático en México. Vale la pena mencionar que la mayoría de las empresas con capital extranjero han reinvertido sus utilidades en México, lo que ha permitido crecimientos considerables en todos los jugadores de esta industria.
-¿Van a fortalecer sus campañas de promoción y mercadeo en la Unión Europea o en Asia?
-Sí, con el apoyo de Proméxico y el Gobierno Federal. En forma individual, nuestros asociados realizan sus propias campañas de mercadotecnia y están presentes en ferias internacionales, y a nivel de la Asociación, hemos acordado llegar a ferias más especializadas donde hemos puesto los objetivos de crecimiento en los mercados. Por ejemplo, China es un mercado que atendemos como Asociación, pero por supuesto los asociados están presentes de forma individual en las grandes ciudades de China, y desde Aneberries también estamos trabajando para promocionar nuestras frutillas en Rusia, China y Japón, así como en algunos otros mercados del sudeste asiático, y en ferias especializadas, con un gran apoyo del Gobierno Federal.
¿Estaría a favor Aneberries de crear una marca de calidad para berries mexicanas a nivel nacional?
– Buena pregunta, ya que en estos momentos en nuestra Asociación estamos trabajando en definir las zonas geográficas donde se producen berries para avanzar en un estándar de calidad para todos y posteriormente trabajar en una marca colectiva que pueda identificar a las berries de México y que pueda marcar las características y condiciones desde esa misma zona de producción. Podríamos pensar en ver cómo se logró esa identidad con los cítricos de Valencia en España, y cómo han avanzado los aguacates mexicanos. Esperamos que en una o dos temporadas más de producción podamos tener ya una marca colectiva
-El sector de la exportación de berries está en aumento, ¿Cuál es la clave del éxito?
-La cercanía con Estados Unidos y Canadá es muy importante pues es el mercado más grande del mundo para consumir berries. Tenemos también condiciones climatológicas favorables para estos cultivos, tierra y agua. La mano de obra, aunque es uno de nuestros mayores retos, también es una de nuestras ventajas, ya que es más fácil trasladar personas internamente dentro de nuestro país, que de un país a otro, como sucede en Estados Unidos, Europa, etcétera.
– ¿Tienen demanda las berries en el mercado nacional?
-Si hablamos de una población de más de 120 millones de habitantes, el mercado es interesante pero los berries son relativamente nuevos para el consumidor; vemos un potencial muy alto en desarrollar el mercado nacional. La fresa, por mucho, es el más posicionado y vendido de los berries en nuestro país. No obstante, el consumo nacional va creciendo en porcentajes altos de forma anual. En el caso de zarzamora, frambuesa y arándano, hay que enfocarse más a realizar campañas para incrementar el consumo nacional, aunque está creciendo, pero quizás los precios son altos y eso no ha permitido la expansión del consumo de las frutillas. Estamos buscando asociarnos para realizar campañas de promoción con grandes asociaciones de supermercados a nivel nacional y ya hemos hecho un primer acercamiento con la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio o Departamentales (Antad), para que podamos incentivar más el consumo de las berries y, por supuesto, buscaremos realizar campañas a través también de los medios de comunicación.
– ¿Cuáles son las necesidades a nivel de producción que tiene el sector actualmente? ¿Los costos de producción son altos para el productor?
-El mercado en el mundo es solo uno, y la oportunidad está en llegar al consumidor con un producto de muy alta calidad y al mejor costo, independientemente del lugar en el que se produzca. Dicho esto, los productores se encuentran enfocados a la eficiencia y alta productividad. En los últimos años hemos visto una transformación a mayor tecnología en la producción, lo que requiere mayor inversión. Pero cuando se visualiza en punto de equilibrio o costo por unidad, hace que los costos en México sean competitivos y permiten una rentabilidad atractiva.
-¿A qué se deben los buenos precios de las frutillas mexicanas durante las últimas campañas?
-Principalmente a la reducción de volúmenes de producción de otras regiones o países. También a que la demanda de nuestros mercados se mantiene con tendencia positiva. Aunque los precios de los últimos dos años fueron buenos, si analizamos los mercados de los últimos 10 años veremos una reducción considerable de los precios al pasar los años. Se debe también a la cercanía del principal consumidor del mundo, que es Estados Unidos, ya que ir por tierra es mucho más económico y vía fronteriza se puede estar en 16 horas o quizás menos, y todos los temas de logística, y llegar al mercado en contraestación te da la oportunidad de obtener buenos precios, unido a la calidad y a la inocuidad de la fruta mexicana.
-¿Cuáles son los mercados internacionales donde se están exportando las berries de México?
-Estados Unidos, Países Bajos, Reino Unido, Italia, Rusia, Alemania, Canadá, Emiratos Árabes, Bélgica, Arabia Saudita, España, Francia, Japón, Irlanda, Chile, Hong Kong, Brasil, Suiza, China, Singapur, Suecia, Panamá, Qatar, Belice, Luxemburgo, Kuwait, Turkmenistán, Kazakhstan, Israel, Indonesia y Malasia. Porcentualmente, el mayor importador es Estados Unidos, donde se puede tener hasta un 98% de cuota de exportación, y después el resto de mercados, siendo la Unión Europea un mercado importante. En el caso de Japón, donde exportamos unas 500-600 toneladas de arándanos, se exportan miles de frutos y en Europa pasa lo mismo, exportando unas 800 toneladas, más o menos.
-Dentro de las populares frutillas, ¿cuál es más rentable para el sector: arándano, frambuesa, fresa o zarzamora?
-Si consideramos por regiones o disponibilidad de la misma tierra o agua, o la limitante del clima para la producción de los cultivos, podemos decir que es más rentable para Jalisco el crecimiento que ha tenido tanto en frambuesa como arándanos, y para Michoacán tanto la frambuesa como la fresa.
-¿Cuáles son los retos a los que se enfrenta actualmente este sector?
– Por un lado, tenemos que generar nuestra propia genética o variedades nacionales, así como la capacitación a técnicos que asesoren, falta mano de obra, elevar los estándares en responsabilidad social que permitan mejorar la calidad de vida de los jornaleros, etcétera. Por otro lado, es muy importante encontrar una mejor logística para las exportaciones a países lejanos; estamos trabajando de la mano con Gobierno para que se habiliten más vuelos desde el Aeropuerto de Guadalajara especializados en cargas, y que los mismos sean directos hacia mercados asiáticos, Medio Oriente y Península Arábica, para no depender de las rutas vía Europa o Estados Unidos, para acceder con mayor rapidez a otros mercados. Con respecto a la mano de obra, es un reto importantísimo, pues ya literalmente estamos importando personal de otros Estados, y el éxito de las berries es que se trabaja con personal local de Michoacán, Jalisco, Colima o Guanajuato, y debido a su crecimiento sectorial, se traen jornaleros de Veracruz, Chiapas, Tabasco, Oaxaca, Guerrero, y con ello asociado la gran responsabilidad social, para que vengan en unas condiciones de hábitat y salud. Actualmente, Aneberries tiene instrucciones de formar una Comisión de Responsabilidad Social para darles mejores condiciones a los trabajadores.
(Texto: Paco Seva)