Marruecos espera alcanzar esta temporada 2016-17 los 2,36 millones de toneladas en su cosecha de cítricos, lo que va a constituir «una cosecha récord», según anunció el ministerio de Agricultura en un comunicado. Esta producción representa un nuevo duro golpe para el sector citrícola española, inmerso en una crisis de precios y de dura competencia con terceros países en el mercado europeo, que ya le está llevando incluso a barajar movilizaciones.
Esta cosecha de uno de los productos más exportados del campo marroquí va a suponer un 16% de aumento con respecto a las cifras de la campaña 2015-16, según la nota.
La previsión de campaña de cítricos -entre los que destacan naranjas y mandarinas como productos más exportados- es la segunda buena noticia del sector en Marruecos, después de que Estados Unidos levantara el pasado octubre un veto a todos los cítricos marroquíes que decretó en enero por haber detectado la presencia de larvas de la mosca mediterránea.
Los cítricos marroquíes, que se exportan hacia la Unión Europea, Rusia, Estados Unidos y Oriente Medio, son uno de los productos del campo marroquí más competitivos en el exterior, y las previsiones del Plan Maroc Vert (una estrategia global de la agricultura marroquí) prevé que en 2018 la producción alcance los 2,9 millones de toneladas.
El ministerio marroquí hizo unas previsiones globalmente positivas conseguidas gracias a las abundantes primeras lluvias del otoño, caídas en los últimos días, que permiten aventurar «buenas perspectivas e indicadores prometedores».