Más de un millón de hectáreas de secano de las campiñas se van a quedar este año sin ayuda agroambiental, según denuncia Asaja Sevilla, que pide a la Consejería de Agricultura que no dé la espalda a los cultivos de secano.
El motivo es que, según el técnico del departamento de ayudas de la patronal agraria, José Fernando Robles, la ayuda a sistemas sostenibles de cultivos herbáceos de secano (submedida 10.1.4), que se incluye en las nuevas agroambientales (medida 10: Agroambiente y clima) del Programa de Desarrollo Rural (PDR) de Andalucía «no verá la luz este año ya que la Junta no prevé su convocatoria», según recoge Inma Lopera en abcsevilla.es.
La ayuda agroambiental supondría para los agricultores de herbáceos de secano entre 98 y 116 euros por hectárea
Así, la de los cultivos de secano será «la única submedida del paquete de la ayuda agroambiental que quedará pendiente, ya que la ayuda a los sistemas sostenibles de cultivos hortícolas intensivos y flor cortada en invernadero (submedida 10.1.9) y la ayuda al mantenimiento de sistemas singulares: castaño y uva pasa (submedida 10.1.10), sí se convocarán en 2017».
La ayuda agroambiental supondría para los agricultores de herbáceos de secano un importe de 116,09 euros por hectárea para aquellas explotaciones en espacios protegidos (zonas Ramsar) y de 98,36 euros por hectárea para las explotaciones en zonas no Ramsar.
Asaja Sevilla critica, además, que los criterios para obtener estos pagos «no son nada fáciles», pues establece como criterio de admisibilidad que la pendiente media del recinto que vaya a acogerse a la ayuda agroambiental sea superior al 8%, lo que dejará fuera muchas solicitudes. Por ello, la patronal agraria ha solicitado a la Consejería de Agricultura que dicho requisito pase a ser un «criterio de prioridad, pero no de exclusión», dado que la asignación de la ayuda será en régimen de concurrencia competitiva, aunque «no tenemos constancia de que la Administración haya admitido dicha alegación», sostiene el técnico José Fernando Robles.
Aparte de esta pendiente, los agricultores tendrán que cumplir otros requisitos como el pertenecer a una agrupación de producción integrada, el disponer de una explotación con superficie de secano con los cultivos elegibles para esta operación (cereales, oleaginosas, proteaginosas y leguminosas), y que la superficie de secano mínima sea de una hectárea. Además, para aspirar a las ayudas hay que cumplir unos compromisos a cinco años, como que las parcelas obtengan la certificación en producción integrada, que el agricultor asista al menos a dos jornadas formativas, la realización de siembra directa y la implantación y gestión de márgenes multifuncionales, entre otros. Compromisos que muchos agricultores han comenzado ya a cumplir pese a que la ayuda no se va a convocar este año.
Las razones que apunta la Consejería para retrasar la apertura de esta línea de ayuda agroambiental es que «todavía no hay reglamento (bases reguladoras) para convocarla. Se está trabajando en estos reglamentos, pero al menos hasta 2018 no van a estar listos», avisa.