Más tarde, los vinos lograban el reconocimiento interno y aumentaron el porcentaje de ventas en España aunque, nuevamente, la crisis económica "ha vuelto a poner sobre el tapete la necesidad absoluta de estar en el mercado global".
"Nuestra reacción a la crisis es exportar ahora más que nunca y el sector del vino en general también lo ha hecho", recalca.
"Mi hija está en California ahora, el enólogo ha viajado a Rusia y yo voy a China a finales de mayo", ha subrayado este bodeguero, que subraya el camino sin retorno hacia la internacionalización.
Falcó, que produce vinos en el pago Dominio de Valdepusa (Malpica de Tajo, Toledo) y en la finca "El Rincón" (Aldea del Fresno, Madrid)-, quiere afianzarse en el sudeste asiático en mercados en ebullición como China, Corea del Sur o Filipinas.
Sobre este último, recuerda que "nosotros tuvimos distribución en su momento" allí, y la aparcaron al considerar que no tendría gran consumo para los vinos españoles de calidad. Pero ahora vuelven a apostar por Filipinas al constatar que vuelve a ser interesante.
"Todo esto tiene que ver con la emergencia de las clases medias con capacidad de compras de vinos de calidad, algo que vemos en todos los mercados emergentes", comenta Falcó.
Mercados atractivos para el vino y el aceite
Estos países "son una suerte para el vino y espero que pronto también lo sea para nuestro aceite", remarcó Falcó, que subraya igualmente las perspectivas positivas en EEUU, Rusia o Brasil.
Añade que América "está creciendo mucho" y que países como Perú, que hasta ahora no eran clientes significativos de caldos españoles y menos de los vinos de pago, ofrecen nuevas oportunidades de venta.
En este sentido, defiende el impulso de los acuerdos comerciales entre la Unión Europea y los países del continente americano para reducir las trabas a la importación que representan sus aranceles, que son muy altos, por ejemplo, en Brasil.
Sobre las perspectivas en el mercado español, Falcó recuerda que el Círculo Fortuny -asociación que engloba a empresas de productos de lujo, que él mismo preside- constata que este nicho "está creciendo" en general, gracias a los turistas extranjeros de alto poder adquisitivo que la visitan.
"Dos terceras partes de las ventas de Loewe en sus tiendas de Madrid o Barcelona son a clientes de alto nivel, como chinos y asiáticos en general o de América del Sur", concluye Falcó.