Siempre se ha dicho que si Mahoma no va a la montaña, será la montaña quien vaya a Mahoma. Por eso, la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) ha aprovechado la visita que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, hará a León el próximo día 23 para solicitarle una reunión directa en la que puedan transmitirle en directo las preocupaciones del sector agrario y ganadero.
Y es que si alguna vez se ha criticado que la ministra de Agricultura no es de las que le gusta mucho mancharse las botas y pisar los campos en sus visitas, sobre todo cuando hay problemas o tragedias en los cultivos, del presidente del Gobierno no se espera que ni se acerque… salvo que haya algún caminorural cercano para dar sus paseos.
Por eso, esta organización dejará sus botas de campo para ponerse zapatos y acercarse hasta Rajoy para ver si pueden «arrancarle un compromiso expreso de apoyo para paliar la dramática situación por la que están atravesando los agricultores y ganaderos leoneses y que el sector agrario deje de ser el gran olvidado de la administración».
«El profesional agrario en nuestra provincia está atravesando una situación dramática a consecuencia de la extrema sequía, tanto meteorológica como hidrológica, que en 2017 ha impedido que los cultivos de regadío tuvieran la producción deseada, y sin saber si dispondrán de agua suficiente para la próxima campaña», señala UCCL en una nota.
Y, por supuesto, para hablar de la reforma de la Política Agraria Común (PAC) a partir del 2020, que será otros de los asuntos a trasladar a Rajoy durante el encuentro, con el objetivo de que el presidente «conozca de primera mano la problemática de los profesionales que viven del y en el campo».
Lo dicho, si Mahoma no va…