EFE.- La exhibición muestra "la problemática de acceso al agua y reafirma la lucha de estas mujeres", ha explicado Abella a Efe durante la presentación.
Su vida es recreada a través de fotografías, vídeos y una mezcla de los sonidos del día a día con músicas tradicionales, captados en Burkina Faso, Mauritania, Chad y, principalmente, Etiopía.
El agua, la mujer
Representaciones de mujeres y niñas que, desde los cinco años, suministran el 90% del agua que llega a sus casas y dan, así, la vida a sus familias.
Para el autor, son "hadas" que, tras varias horas de camino y más de diez kilos de peso a la espalda, solo consiguen llevar una media de cinco litros por persona, menos de lo que supone en un país desarrollado vaciar la cisterna del inodoro.
Además, la dedicación diaria a esta labor también supone una "rémora para el desarrollo de sus comunidades", ha señalado el fotógrafo.
Imposibilita el desarrollo al impedir a las mujeres incorporarse al tejido productivo y a las más pequeñas, acudir a la escuela y evitar que se perpetúe el círculo vicioso de la pobreza.
Sin embargo, Abella también retrata el trabajo de diversas ONG dedicadas a facilitar la escolarización e introducir a las subsaharianas en cooperativas agropecuarias, pero en opinión del español la situación sigue siendo "frustrante".
"Aunque ellos tienen fuerza, no parece que haya futuro por el comportamiento de sus gobiernos, por la falta de inversión internacional, porque están olvidados", ha reflexionado Abella.
Cinco viajes y una exposición
El fotógrafo ha hecho cinco viajes a la región retratados en la exposición abierta hasta el 15 de febrero en "Roca Lisboa Gallery".
Una versión anterior de esta muestra se pudo ver en Barcelona en 2009, y Abella quiere completar el proyecto con la documentación de la realidad que retrata.
Afecta a 800 millones de personas en el mundo de Africa, de zonas de Latinoamérica, aunque en situación menos precaria, y de barrios deprimidos de las megalópolis asiáticas, ha dicho.