El presidente de la Comunidad General de Riegos del Alto Aragón, César Trillo, ha asegurado que su organización considera «irrenunciable» la construcción del embalse de Biscarrués y ha anunciado la interposición de un recurso en el Tribunal Supremo contra la reciente sentencia de la Audiencia Nacional que anula el proyecto.
En una comparecencia de prensa, Trillo descartó la posibilidad de optar por el estudio de nuevas alternativas al embalse así como de abrir nuevas vías de negociación, y se ha remitido al acuerdo de la Comisión del Agua que plantea la construcción de Biscarrués y un embalse lateral de almacenamiento en Almudévar.
Consideran una «grave irresponsabilidad» la posición de determinados colectivos ajenos al conjunto de la «realidad rural»
Tras subrayar que «no es tiempo de buscar alternativas, porque eso, al final, es no hacer nada», el responsable regante ha advertido que desde el planteamiento inicial de un embalse de regulación de 600 hectómetros cúbicos al finalmente acordado de 35 hectómetros «esta organización ya ha cedido mucho».
Ha calificado de «grave irresponsabilidad» la posición de determinados colectivos ajenos al conjunto de la «realidad rural» de Aragón, y ha recordado que Riegos del Alto Aragón ha acometido inversiones para transformar 60.000 hectáreas en regadío y modernizar otras 30.000
También ha expresado su malestar a las alusiones hechas desde distintos colectivos opuestos al proyecto al calificar de «despilfarro» la obra y reclamar el destino de los fondos a la limpieza del río Gállego del contaminante Lindano.
Ha calificado de «falsos» estos argumentos al existir un compromiso unánime de la Comunidad General de Riegos del Alto Aragón de financiar el proyecto en su totalidad. A este respecto, ha precisado que «ni a la administración estatal, ni a la europea, ni a la autonómica el embalse les cuesta un céntimo de euro».
«¿Es que tenemos algo que ver nosotros con el lindano, con Inquinosa o con la contaminación del río Gállego?», se ha preguntado Trillo al referirse a la petición de los colectivos opuestos a Biscarrués de destinar el coste de la obra a descontaminar el referido cauce fluvial.
También ha expresado su malestar ante la multitud de denuncias interpuestas en Bruselas por las obras de regulación en el sistema del Ebro, un río cuyo caudal ecológico establecido es de 107 metros cúbicos por segundo, «más del doble de la suma del resto de caudales ecológicos de los ríos españoles». Ha añadido que el Ebro tiene una capacidad embalse en la actualidad del 50%, muy inferior al 220% del Guadiana, el 190 del Júcar, el 180 del Segura o el 150 del Guadalquivir.
Trillo ha insistido en la voluntad de su organización de «seguir apostando» por el sistema binario Biscarrués-Almudévar y de no renunciar a la ejecución del proyecto. «Si al final -ha añadido- el Tribunal Supremo elimina la regulación del Gállego lo tendremos que asumir, pero nosotros no estamos por una nueva negociación».