El presidente de los regantes ha transmitido al cuerpo de comuneros que "se presenta una situación muy complicada", aunque añade que su junta de gobierno está "trabajando incansablemente para paliar, en la medida de los posible, el previsible déficit de agua para nuestro regadío tradicional".
Marín ha defendido la independencia de la Comunidad de Regantes de Lorca y aclara que sus miembros están "alejados de toda consigna política", al tiempo que ha dicho "no tener constancia de que la corporación municipal esté realizando gestión alguna para paliar la escasez de a la que nos vamos a enfrentar en los próximos meses".
Rechazan que la esasez de agua se deba a un aumento de la zona regable
También ha puesto de manifiesto que "nadie desde el ayuntamiento se ha puesto en contacto con esta Comunidad de Regantes para interesarse por la situación que estamos atravesando" y ha señalado que las gestiones que está realizando este organismo para obtener agua de riego se están llevando a cabo "desde el seno del Sindicato central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura".
Además Marín ha expuesto que "no es cierto" que el problema de la falta de agua se deba a la ampliación de la superficie regable, sino al "alarmante descenso" de los volúmenes embalsados en la cabecera del Tajo.
Según Marín en diciembre, "si la climatología no lo impide" solo se distribuirán 10,5 hectómetros cúbicos para regadíos procedentes del trasvase Tajo-Segura, por lo que a la Comunidad de Regantes de Lorca le correspondería 762.000 metros cúbicos mensuales.
Esa cantidad supondrá 20 hectómetros cúbicos menos de agua al año sobre la dotación máxima que puede asignarse a esta organización de regantes, que es de 29 hectómetros cúbicos.