Esta acreditación ha sido posible gracias al trabajo de adaptación realizado a lo largo de los tres últimos años por las queserías y ganaderías del sector caprino murciano, en colaboración con la Consejería de Agricultura y Agua, que han asumido el reto de la mejora de la calidad de estos quesos como su principal objetivo para mejorar la imagen hacia el consumidor.
El cumplimento de esta norma europea reconoce a las empresas y organismos responsables de la certificación de alimentos de calidad diferenciada las garantías en aspectos tan importantes como la imparcialidad e independencia en cada uno de los procesos de toma de decisiones sobre la concesión de la certificación a los operadores (queserías y ganaderías) involucrados en la producción de quesos DOP.
El Consejo Regulador aplica programas anuales de control a las ganaderías y queserías, que una vez superados de forma satisfactoria, les permite utilizar la marca de la DOP en aquellos productos elaborados, madurados y envasados, según los requisitos que se recogen en los pliegos de condiciones registrados por la Dirección General de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión Europea.
Todo ello supone un valor añadido para el consumidor de estos quesos, que son reconocibles fácilmente por presentar sobre su etiqueta comercial las etiquetas numeradas con el logotipo de la Denominación de Origen Protegida y el logotipo europeo común a todos los alimentos amparados por la DOP.