Según esta organización de profesionales, los estudios realizados por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria revelan que los montes canarios generan anualmente más de 600 millones de euros en servicios. Este valor es equivalente al 2% del PIB de Canarias.
Los servicios ecosistémicos que más se producen son agua para consumo doméstico y agricultura por valor de 390 M€/año y uso recreativo y turístico con más de 170 M€/año. En menor cuantía aportan fijación de CO2 (25 M€/año), Biodiversidad (8 M€/año), producción de bienes como madera o leña (2 M€/año) y caza (0,5 M€/año).
En Canarias se consumen alrededor de 3.997.508.976 litros de combustibles, por lo que cobrando 1 céntimo de €/litro de combustible se obtendría una cuantía de 39.975.089€ para compensar la actual fijación de CO2 que realizan los bosques canarios, así como completar la superficie de bosque potencial (90.000 hectáreas más) y así maximizar la fijación de CO2 en Canarias.
No es un instrumento de recaudatorio
El céntimo forestal, en opinión de PROFOR, "no es un instrumento recaudatorio. Es una herramienta para compensar de forma eficiente la emisión de CO2, siendo el objetivo último contribuir a que las emisiones tiendan a cero. El céntimo forestal tiene que ser un instrumento finalista, y el dinero recaudado debe emplearse únicamente para actuaciones que fijen CO2".
Así consideran que con la implantación del céntimo forestal en Canarias (39.975.089€) se podría establecer la base financiera de una adecuada Política Forestal, que garantice una auténtica “Silvicultura del Carbono”, basada en: Pagos por Servicios Ambientales para propietarios forestales (fomento de la conservación y mejora de los bosques); repoblación de superficies desarboladas (fijación definitiva de CO2); selvicultura preventiva (evitar emisiones extras por incendios forestales); o selvicultura productiva (fijación temporal de CO2).
En PROFOR "somos conscientes, de que no corren buenos tiempos para incrementos de partidas presupuestarias, subidas de impuestos, desvíos de dinero de otras partidas prioritarias como las de Sanidad y Educación. Pero no por ello dejamos de denunciar la falta de sensibilidad que se ha tenido con nuestros bosques y de la necesidad de ser imaginativos y buscar formas alternativas de financiación".