El Grupo de Contacto de Ajo, conformado por productores y comercializadores de España, Francia e Italia, exigirán a la Comisión Europea un mayor control en las aduanas para evitar la entrada fraudulenta de ajo congelado chino.
Así lo dictaminaron los miembros del Grupo de Contacto de Ajo durante su reunión celebrada esta semana en la localidad vallisoletana de Peñafiel, donde se expusieron los resultados del informe elaborado por la Mesa Nacional del Ajo sobre las presuntas irregularidades en las importaciones de ajo congelado proveniente de China, cuando en realidad este ajo entra como ajo refrigerado.
Por ello, desde el Grupo de Contacto de Ajo se exigirá a la Comisión Europea que aumente los controles en la frontera, especialmente en Bélgica -por donde entra una parte importante del ajo chino congelado, bajo la denominación resto de hortalizas congelas-, así como que se estudie la posibilidad de crear un código TARIC específico para el ajo congelado.
UN 17% MENOS DE SUPERFICIE DE SIEMBRA EN ESPAÑA Y FALTA DE HERRAMIENTAS PARA HACER FRENTE A PLAGAS, ENFERMEDADES Y MALAS HIERBAS
La reunión del grupo de contacto también sirvió para repasar la situación de la superficie de siembra en España, la cual, teniendo en cuenta los datos de Agroseguro de 2021 y 2023, nos indica que la superficie se verá reducida en más de un 17% en el territorio nacional. Una merma que viene dada por la situación de sequía que sufre todo el país, así como los problemas que están causando los hongos al cultivo del ajo. Cabe destacar que la comunidad autónoma que mayor descenso de superficie de siembra ha experimentado ha sido Andalucía, con un 42% menos, con respecto a la anterior campaña.
La reducción en la superficie de siembra, la sequía y los problemas fitosanitarios que experimenta el cultivo del ajo, harán que la cosecha de la presente campaña sea bastante inferior a la pasada, que ya fue baja.
Por último, el Grupo de Contacto de Ajo también puso de manifiesto la falta de herramientas que existe en el cultivo del ajo para hacer frente al control de plagas, enfermedades y malas hierbas al ser un cultivo minoritario en la UE.
Por ello, se ha planteado elaborar una ficha para cada problema fitosanitario, indicando las soluciones disponibles en cada país productor para poder conocer la situación a nivel europeo y las necesidades de sus productores para cultivar el ajo de forma adecuada.