Primero fue porque los operadores hicieron acopio ante la previsión de una alta demanda de materia prima durante los primeros días del estado de alarma. Luego debido al menor consumo de los productores ganaderos, debido a su bajada de las ventas durante la pandemia y el cierre del canla Horeca. Al final, por una causa o por la otra el resultado siempre es el mismo y por eso los precios de los cereales, salvo el del trigo duro, mantienen su tendencia bajista en los mercados mayoristas en la semana 16 (del 13 al 17 de abril), según los datos difundidos este lunes por la Asociación de Comercio de Cereales y Oleaginosas de España (Accoe).
El precio del trigo blando se situó en 204,82 euros/tonelada (-1,00 % respecto a la semana anterior), mientras que el maíz cotizó a 184,50 euros/tonelada (-0,94 %) y la cebada a 178,82 (-1,86 %).
Un decenso generalziado salvo el trigo trigo duro figura como el único cereal que experimenta una subida tras alcanzar una media de 272,50 euros/tonelada, lo que supone un 1,23 % más que en la semana anterior.
En cuanto a la cebada de malta, como la mayoría de cereales, registra un descenso en su precio medio del 1,37 % en comparación a la semana anterior tras situarse en 179,25 euros/tonelada.
Desde enero de 2020, las subidas de los precios de los cereales han sido las siguientes: del 1,85 % en el trigo blando; del 2,37 % en el maíz; y del 8,06 % en el trigo duro.
El acumulado desde enero del precio de la cebada, han caído, sin embargo, el -1,60 %.
En el mercado de proteínas y coproductos, la evolución desde el pasado enero ha sido positiva para la pipa de girasol (345 €/t, +8,7 %), colza (235,00 €/t, +19,15 %), soja (335 €/t, +4,48 %) y cascarilla (159 €/t, +10,06 %); el precio de la pulpa (190 €/t) ha permanecido estable (0 %).