Los precios de los cereales despidieron el pasado año con la misma tónica con la que lo vinieron haciendo durante prácticamente los doce meses anteriores, con descensos leves en todas las categorías. Con esta última cotización se cierra un año negativo en cuanto a precios, ya que aunque la caída ha sido sensiblemente menor que la de 2016 lo cierto es que la producción también ha sido sensiblemente menor por culpa de la sequía.
Por ello, aunque en la comparativa de todo el año los precios han acabado en positivo (salvo el trigo duro que ha acumulado un descenso de 2,26%) eso no evita que haya sido un mal 2017 para los productores que, de esta forma, vuelven a acumular pérdidas un año más. Aunque en esta ocasión solo sea porque el descenso de la producción no haya llevado de forma pareja un incremento similar en los precios. Como se destacaba desde la Lonja de León. Un año «nefasto y para olvidar».
Las exportaciones, a las que este año se han sumado (y lo seguirá haciendo en el futuro) los cereales sin aranceles de Ucrania, siguen siendo un losa demasiado fuerte para que la producción nacional pueda competir en igual de condiciones
Con este panorama, los precios medios de los cereales bajaron en la misma tónica de semanas anteriores en los mercados mayoristas durante la semana comprendida entre el 25 y el 29 de diciembre, excepto el trigo duro, que se mantiene invariable, según ha informado este martes 2 la Asociación de Comercio de Cereales y Oleaginosas de España (Accoe).
Las cotizaciones medias nacionales fueron las siguientes: trigo blando, 188,09 euros/tonelada (-0,03 %); cebada, 183,58 euros/tonelada (-0,05 %); cebada de malta, 188,83 euros/tonelada (-0,08 %); trigo duro, 216,67 euros/tonelada (estable), y maíz, 175,664 euros/tonelada (-0,01 %).
En comparación con enero de 2017, los precios del trigo blando han subido un 11,20 % y los de la cebada, un +18,83 %; mientras, los del maíz han caído un 0,62 % .
Por el contrario, las cotizaciones del trigo duro han disminuido un 2,26 %, según los datos de Accoe.