Da la impresión de que los mercados siguen siendo ajenos a la realidad del sector cerealista y continúan presionando a la baja las cotizaciones, alcanzado incluso los tres euros por toneladas en el caso de la cebada, que continúa en caída libre estas últimas semanas, a pesar de la voz de alarma, pero también de enfado de los agricultores.
En la misma semana que desde la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) se denunciaba el descenso brutal de los precios en origen y el desmesurado aumento de los precios del gasóleo y otros imputs, imprescindibles para la consecución de la cosecha, que “nos lleva a trasformar la cosecha en una campaña agrícola nefasta”, la realidad de los mercados ha vuelto a golpear al sector cerealista.
Los precios de todas las variedades, pero especialmente en la cebada (porque ya se están realizando las primeras siegas) y del trigo blando, volvieron a bajar en los mercados mayoristas durante la semana comprendida entre el 25 y el 29 de junio, según ha informado este lunes 2 la Asociación de Comercio de Cereales y Oleaginosas de España (Accoe).
Las cotizaciones medias nacionales de cereales fueron las siguientes: trigo blando, 180,60 euros/tonelada (-3,61 %); cebada, 169,73 euros/tonelada (-6,31 %); cebada de malta, 183,60 euros/tonelada (-2,60 %); trigo duro, 193,00 euros/tonelada (-1,03 %) y maíz, 183,36 euros/tonelada (-1,88 %).
En comparación con enero de 2018, los precios del trigo blando han bajado el 3,97 %, los de la cebada han disminuido el 7,55 % y los del trigo duro, el 10,92 %. En contraste, las cotizaciones del maíz han subido el 4,40 % en lo que va de año.
Malos tiempos para el sector cerealista, que además observa cómo la Comisión Provincial de Estadística Agraria de la provincia de León celebrada esta semana revisaba a la baja la estimación de los rendimientos de los cereales de invierno, situándolos en 436.946 toneladas, aunque de forma paralela, y a nivel nacional, Cooperativas Agro-alimentarias señalanuna previsión de que será un 45% superior a la del año pasado.