EFE.- Ese día se detectaron 14 focos de fuego en Karrantza que quemaron 198,48 hectáreas, fundamentalmente de matorral, lo que supuso un daño económico estimado en 119.000 euros.
Todos estos datos han sido facilitados hoy por la diputada foral de Agricultura de Bizkaia, Irene Pardo, en las Juntas Generales de este territorio, donde ha comparecido a petición del PP para informar de los incendios forestales ocurridos el 9 de marzo.
Pardo ha detallado que ese día, en el que había un riesgo «extremo» de incendios, con fuerte viento sur y baja humedad, se registraron fuegos de pequeña magnitud por la quema de restos vegetales en los municipios de Abadiño, Mañaria, Sopuerta y Trapagaran, además de los 14 focos en Karrantza.
En este último caso, participaron en la extinción de los incendios cinco retenes del servicio de Montes, otros tres de la sociedad pública foral Basalan, bomberos voluntarios y dos helicópteros, uno del Ministerio de Agricultura y otro de la Ertzaintza, según ha concretado la diputada.
El informe técnico elaborado por la Diputación apunta a que estos incendios en Karrantza fueron «simultáneos» y avivados «en diferentes zonas», por lo que se concluye que fueron «intencionados y de forma organizada», ha indicado.
Por ello, la institución foral ha remitido su informe a la fiscalía de Medio Ambiente y a la comisaría de la Ertzaintza de Balmaseda para que se investigue la «autoría» de estos incendios.
«Esto es un delito y tiene que ser tratado por los órganos competentes», ha señalado Pardo, quien ha dicho que las investigaciones están «en marcha» y se han hecho «rastreos» de la zona, aunque por ahora no dispone de más información.
Ha indicado que se vieron afectados montes de utilidad pública y que fundamentalmente ardieron zonas de matorral, que rebrotan, por lo que se ha estimado en 600 euros por hectárea quemada la repercusión económica de estos incendios, hasta totalizar 119.000 euros.
Irene Pardo ha explicado que el informe indica también que el impacto de estos incendios en la vida silvestre fue «bajo» y provocó un riesgo de erosión «moderado alto» en unos suelos «frágiles, pero con relativa capacidad de recuperación».
El apoderado del PP Arturo Aldecoa ha criticado a los «desaprensivos que pretenden dañar zonas naturales» y ha pedido a la Diputación que «persiga hasta el final» a los autores de estos incendios para que se les pueda «castigar».
Joaquín Colmenero, juntero del PSE-EE, ha apuntado la «hipótesis» de que los incendios podrían haber sido provocados por alguien que pretenda conseguir una zona de «pastos más amplios».
El representante de EH Bildu Asier Vega ha dicho que su grupo ya tenía conocimiento de que vecinos de la zona veían desde el pueblo el 9 de marzo a «gente en diferentes puntos prendiendo fuego».
Ha asegurado que miembros de retenes que actuaron ese día en Karrantza dijeron a EH Bildu que en esos incendios no se cumplió en varios aspectos el protocolo de seguridad denominado Ocela, dado que la comunicación entre el personal fue «deficiente», no había retenes de vigilancia y también hubo deficiencias en el traslado de los efectivos.
La diputada foral de Agricultura le ha respondido que, hasta lo que ella sabe, sí se tuvo en cuenta el protocolo de seguridad y los retenes de incendios «han venido funcionando perfectamente», aunque se ha mostrado dispuesta a llevar a cabo una «revisión» de la situación para aplicar las mejoras necesarias.