Los huevos clase M y el aceite de oliva virgen extra son los productos con un menor diferencial entre el precio de origen y el de destino, ya que sus cotizaciones iniciales sólo se multiplicaron por 1,77 y 1,79 veces, respectivamente, al llegar a la tienda.
Entre los productos ganaderos, la mayor diferencia fue la de la la carne de ternera, que se multiplicó por 4,11, desde los 4,28 euros en origen a los 17,58 en destino.