Las organizaciones agrarias han presentado alegaciones ahora porque no están de acuerdo por ejemplo con que no se analicen los daños en verde y no hagan seguimiento, lo que se traduce, en opinión del sindicato, en que no se valora la producción real.

     "Ahora no tenemos oportunidad de encargar un contraperitaje", destaca Sanz, que ha dudado además de la cualificación de algunos de los peritos.

     "Siempre reconocían el cien por cien del daño en todos los cereales y ahora hemos pasado cero", ha recalcado Juan Carlos Montón, presidente de la Asociación de Afectados por la Reserva de Caza Montes Universales, y representante del sindicato en la Junta Consultiva de la Reserva.

     Ha explicado que en años anteriores se pagaba en unos seis meses y en esta ocasión puede pasar hasta un año, teniendo en cuenta además que en la actualidad "los ciervos ya se han comido la cosecha", según Montón.

     El sindicato propone crear en los campos unos vallados que sirvan a modo de testigo para calcular de una manera más fiel la producción.

     Además, aceptan la propuesta de la dirección de la reserva de que los agricultores puedan acogerse a las agroambientales como pago de los daños, siempre que sean voluntarias. Para Roberto Sanz, "los agricultores ya han tenido que cambiar mucho los cultivos y de hecho, en la sierra de Albarracín se ha acabado perdiendo algunos".

Piden una partida presupuestaria para su pago


     Piden, asimismo, que los presupuestos del Departamento de Agricultura y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, que es el organismo que gestiona la reserva, contemplen una partida específica para los daños, algo que no ha ocurrido hasta ahora.

    También que se abonen estas partidas antes que las destinadas a los ayuntamientos de la Reserva: "Somos los agricultores los que damos de comer a los ciervos", ha asegurado Montón.

    Ambos representantes se han mostrado contrarios a que las reservas encarguen la gestión de la venta de trofeos a los ayuntamientos y los agricultores como sistema para financiarse, según, dicen, se ha planteado en algunos foros.

    Sanz ha destacado el apoyo del sindicato a la reserva, creada hace más de 40 años, pero cree que ahora hay una población excesiva de ciervos, entre 3.000 y 4.000, que hay que reducir.

    Por todo ello, han anunciado que van a solicitar una reunión con el Ejecutivo aragonés, como responsable de la reserva.

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