Cecasa se creó en 2000 con 4,3 millones de capital social -aportados en un 68 % por cooperativas y almazaras y, el resto, por entidades financieras-, y unía a 250 cooperativas y almazaras andaluzas, extremeñas y manchegas, pero nunca llegó a operar porque un informe desfavorable de la CNC paralizó el proyecto, aunque después (2010) el Supremo les dio la razón y permitía su actividad.
Por su parte, el secretario general de la Federación española de Industriales Fabricantes de Aceite de Oliva, Enrique Delgado, ha explicado a Efeagro que el deseo de este sector es "reactivar" Cecasa, que ya no tendría oposición de las autoridades de Competencia gracias a varias sentencias favorables a la actividad.
Delgado ha precisado que la cooperativa Hojiblanca tiene actualmente el 50% de las acciones -Antonio Luque figura como actual presidente de Cecasa- y, el resto, se distribuye entre cooperativas, almazaras y particulares.
Delgado apuesta por que Cecasa pueda actuar en el mercado retirando aceite en condiciones adversas de mercado y "ahora hay que ver cómo se retira y a qué precio", entre otras cuestiones. Si todo el sector muestra consenso, la comercializadora podría comenzar de nuevo a operar para el año próximo, concreta.
Recapitalizarse para poder seguir adelante
Para ello, Cecasa necesitará recapitalizarse, con aportaciones de los socios y alguna entidad financiera y, aunque no se han concretado cifras, la operación podría requerir 4 o 5 millones.
Una vez en marcha, Cecasa tendrá capacidad de inmovilizar hasta el 10 ó 15% de la producción de aceite de oliva, para lo que aprovecharán la capacidad de almacenamiento de las almazaras, cooperativas, industriales y la red del Patrimonio Comunal Olivarero, la mayor almacenista del mundo de este producto.
Sin embargo, "a lo mejor no sería necesario retirar más de un 3 ó 5%" en determinadas circunstancias de mercado porque, con esos niveles, ya se notaría una reactivación de los precios, argumenta.
Cecasa pretendía en sus orígenes ocupar el espacio del mecanismo de la intervención pública -derogado por la Unión Europea (UE)- y comprar aceite de oliva para retirarlo del mercado en situaciones de crisis de mercado.
Actualmente el sector cuenta ya con la herramienta denominada "almacenamiento privado", que activa la Unión Europea cuando el sector lo demanda y los precios han caído por debajo de un determinado nivel desencadenante. Consiste en la retirada subvencionada de aceite de forma temporal para recuperar los precios, aunque el producto debe volver al mercado de nuevo posteriormente.