EFE.- López Sors, el único alto cargo de la administración española acusado por los daños causados por la ‘marea negra’ tras el hundimiento del petrolero "Prestige" en noviembre de 2002, ha vuelto a defender hoy la gestión de la catástrofe realizada por la administración española y ha rechazado que el "Prestige" pudiese haber sido trasladado a A Coruña o a Corcubión.
"El buque seguía vertiendo. Tenía peligro de hundimiento. No se sabía si llegaría a destino", ha afirmado López Sors quien en su tercer día de declaración ante el tribunal de la Audiencia Provincial que juzga los daños, en el que solo ha respondido a las preguntas de su abogada al considerar "inaceptable" el trato recibido ayer por los letrados de la acusación y después de que el fiscal haya declinado formular preguntas.
López Sors ha repasado las primeras horas de la tragedia en las que, pese a la orden de la torre de control de Salvamento Marítimo de Fisterra, el capitán Mangouras "no cooperó para tomar remolque" lo que provocó que el "Prestige" no estuviese bajo control hasta la mañana del día 14, quince horas después de que el "Ría de Vigo" hubiese llegado a la altura del petrolero.
Ese retraso, ha argumentado, empeoró el estado estructural del barco que se encontraba en una "situación grave", con continuos vertidos y riesgo "en ciernes" de hundimiento, lo que impedía, atendiendo a la normativa entonces vigente, su traslado a un puerto refugio.
Durante esas horas, el organismo rector que gestionaba la crisis analizó distintas alternativas, entre ellas llevar el "Prestige" al puerto de A Coruña -ya que disponía de una refinería lo que hubiera agilizado las tareas de descarga- una opción descartada finalmente tras una conversación con el práctico de esta terminal, que alertó de que se trataba de una "temeridad" que podría poner en riesgo vidas humanas.
"Llevarlo a A Coruña fue un canto a los buenos deseos pero con seguridad no podríamos haberlo hecho", ha subrayado López Sors.
El traslado del "Prestige" a la ría de Ares o a Ferrol fue también descartado por falta de calado, mientras que la posibilidad de conducirlo a la ría de Corcubión ni siquiera fue propuesta formalmente ya que existía un "riesgo elevado" de que se rompiese en su trayecto.
"No existía la seguridad de que no se rompiese. El "Prestige" no estaba para moverlo de acá para allá", ha afirmado.
En caso de que se hubiese roto durante el trayecto, ha remarcado, los "daños" habrían sido "enormes" "en dinero, en riqueza y en tiempo" por la permanencia de la contaminación ya que el "Prestige" "estaría años soltando carga", ha advertido el ex director general de la Marina Mercante.
"El Exxon Valdez embarrancó en la costa y afectó al doble de longitud de costa que el "Prestige"", ha recordado.
López Sors ha defendido la actuación del Gobierno de España al alejar el barco de la costa y ha citado un documento de WWF-Adena y conversaciones con las cofradías de pescadores en las que pedían que el barco no permaneciese en la costa para no afectar a un importante banco pesquero.
El exdirector de la Marina Mercante ha insistido en que cuando el "Ría de Vigo" tomó remolque, el "Prestige" se encontraba a 4 millas de la costa, una distancia peligrosa para maniobrar, especialmente en las condiciones en las que se encontraba el petrolero.
Asimismo, ha señalado que si la administración no se hubiese hecho cargo, el "Prestige" hubiese embarrancado antes de que la empresa rescatadora, Smit Salvage, se hiciese con el gobierno del buque.
El ex director general de la Marina Mercante ha terminado hoy su declaración ante el tribunal y el juicio se reanudará el próximo 11 de diciembre con la presentación de las pruebas periciales.