Este método consiste en colocar los pollos en nidos artificiales para llevar a cabo su cría en la naturaleza, hasta que son capaces de volar y alimentarse de forma independiente.
Paralelamente, en el entorno del área de reintroducción se han revisado los apoyos de tendido eléctrico con riesgo de producir la electrocución de águilas imperiales y otras grandes aves, reparándose unos cincuenta postes peligrosos, en colaboración con la compañía Sevillana-Endesa.
La mortalidad de pollos de águila imperial ibérica se debe sobre todo al desplome de nidos, a la escasez de alimento en el campo y a las agresiones violentas entre las crías hambrientas o cainismo en zonas de escaso alimento. En Andalucía, esta mortalidad se ha reducido significativamente mediante un programa de gestión de nidadas, que incluye la construcción y consolidación de nidos, el aporte de alimentación suplementaria en el entorno de los mismos y, el rescate o salvamento de pollos con riesgo de muerte por inanición, cainismo u otras causas.
Todas estas actuaciones se realizan en el marco del Plan de Recuperación del Águila Imperial en Andalucía, que desarrolla la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio en coordinación con el Ministerio de Medio Ambiente, Pesca y Alimentación y con el asesoramiento del Comité científico-técnico para la ejecución del citado Plan, integrado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Universidades y SEO-BirldLife. Asimismo, la liberación mediante la cría campestre y el seguimiento de los pollos se ha realizado bajo el asesoramiento de la Estación Biológica de Doñana y en estrecha colaboración con la Fundación Migres.
(Foto: Daniel Burón)