Las ventas de aceite de oliva descendieron el 37,36% en octubre respecto al mismo mes de 2022, lo que supone 18,54 millones de litros en el primer mes de la campaña 2023/2024, ha señalado este martes la patronal Anierac, que destaca que las de aceite de orujo fue un 9,8% superior al de los diez primeros meses de 2022.
La Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (Anierac) ha destacado que en octubre se pusieron en el mercado 52,32 millones de litros de aceite en total, de los que 2,19 millones son de aceite de orujo y 31,58 millones, de aceites vegetales.
Entre los aceites de oliva, el virgen extra sumó 7,10 millones de litros, el 37,13% menos que en octubre de 2022; el «suave», 6,47 millones (-50,83%); el «intenso», 2,61 millones (-14,67%); y el virgen, 2,35 millones (+13,14%).
Las ventas acumuladas de aceite de oliva cayeron el 18,3% en los diez primeros meses del año en comparación con el mismo periodo del año anterior, situándose en 213,34 millones de litros.
De esa cantidad, 89,17 millones de litros fueron de virgen extra (-17,67%); 70,43 millones, de «suave» (-26,40%); 28,39 millones, de «intenso» (-17,61%); y 25,34 millones, de «virgen» (+11,80%).
La patronal ha precisado que el acumulado anual de aceite de orujo en el mercado fue un 9,8% superior al de los diez primeros meses de 2022, con 16,86 millones de litros; y que en ese periodo se pusieron en el mercado 303,61 millones de litros de aceites vegetales, un 9,28 % más.
Solo en octubre, se vendieron 22 millones de litros de aceite de girasol, lo que supone una bajada anual del 2,13%; y 9,16 millones de litros de aceite de semillas, con un aumento del 76,74%.
En los diez primeros meses del año se han comercializado 533,81 millones de litros de aceites, lo que representa una reducción del 3,7% respecto al mismo periodo de 2022, según Anierac.