El sindicato agrario Araga ha responsabilizado al consejero de Vertebración del Territorio del Gobierno aragonés, José Luis Soro, de estar «amenazando» el futuro del cultivo de la alfalfa a través de las sanciones impuestas a los productores por no disponer de tarjeta de transporte.
Según esta organización, las multas son canalizadas a través de la subdirección de Transportes en Zaragoza, dependiente de la referida consejería, y suponen para los productores el pago de 4.000 euros por carro y día cada vez que son parados en sus desplazamientos a las deshidratadoras.
Araga advierte de que si se mantienen las sanciones, el sector «está condenado a desaparecer»
Además, añade Araga, las empresas deshidratadoras son sancionadas con 2.000 euros diarios por los carros que se desplazan a sus instalaciones por no disponer de tarjeta de transporte.
Para este sindicato, el órgano sancionador «ignora» que los carros recolectores de alfalfa son maquinaria agrícola con la misión de recolectar el cultivo del suelo, picarlo y prensarlo, «siendo el supuesto transporte el desplazamiento necesario para su descarga».
Araga destaca en su escrito que la alfalfa es actualmente un sector puntero en Aragón que exporta gran parte de su producción, alrededor de 850.000 toneladas anuales, a países del Golfo Pérsico y a China.
«De continuar con la imposición injustificada de estas sanciones, imposibilitando que puedan trabajar los carros recolectores, todo el sector de la alfalfa en Aragón, y recordemos que somos potencia mundial en la producción de alfalfa deshidratada, está condenado a desaparecer», añade el sindicato.