El estudio, elaborado por la Asociación de Productores de Energías Renovables-APPA, ha sido presentado por José Miguel Villarig, presidente de la Asociación, y Jaume Margarit, director general de la misma, ha sido presentado, por quinto año consecutivo, recoge la aportación de las energías renovables de Régimen Especial a nuestro país en términos económicos y sociales. A tal efecto, realiza una compilación de los principales datos macroeconómicos de estas tecnologías, tales como el impacto en el PIB, la generación de empleo, la balanza comercial, las primas recibidas o los ahorros generados.
Máximo histórico de contribución al PIB
Durante el año 2012, la aportación total de las energías renovables al Producto Interior Bruto (PIB) nacional fue de 10.563 millones de euros, un aumento del 1,7% con respecto al año 2011, con lo que alcanzó su máximo histórico. Por primera vez, el Sector alcanzó una relevancia en términos del PIB del 1%.
La contribución directa aumentó con respecto al año anterior, debido a una mayor producción de electricidad renovable, hasta situarse en 7.411 millones de euros, un 8,4% más que el año anterior. Por el contrario, la contribución inducida descendió hasta los 3.152 millones, debido a la paralización industrial que sufre el Sector como consecuencia de una menor actividad en la construcción de nuevas centrales.
Nivel de empleo en mínimos
En términos globales el Sector de las Energías Renovables registró en 2012 un total de 113.899 empleos, 8.618 menos que el año anterior. Esta disminución del empleo global es mayor que el incremento registrado en 2011 y le sitúa en el peor nivel de los últimos cinco años. El 22% de la destrucción de empleo total corresponde al empleo directo y el 78% al empleo indirecto, debido fundamentalmente a la paralización de la actividad industrial.
Globalmente, la solar termoeléctrica, con 5.973 empleos, y la eólica, con 3.811, fueron las tecnologías con una mayor pérdida de empleo en 2012. Los 888 empleos perdidos en biocarburantes representaron una disminución del 23,4%. De forma contraria, la biomasa eléctrica, con un aumento de 2.460 empleos, la marina con 13 y la solar térmica con 6, fueron las únicas tecnologías con creación de empleo neto en 2012.
Balanza comercial positiva, aportación fiscal e innovación
Desde que se recogen datos para el Estudio sobre el impacto macroeconómico de las renovables en España, las exportaciones del sector en bienes y servicios han superado todos los años a las importaciones. En 2012, las exportaciones netas aumentaron por segundo año consecutivo. El sector produjo exportaciones de bienes y servicios por valor de 3.067 millones de euros y las importaciones alcanzaron los 2.343 millones. El saldo neto exportador fue de 724 millones.
El saldo exportador del Sector contribuye de forma positiva a nivelar la balanza comercial española, que en 2012 tuvo un saldo importador de 30.758 millones de euros y que se encuentra lastrada por la alta dependencia energética española, con un déficit energético de 45.504 millones de euros, el mayor déficit energético español registrado hasta la fecha.
En lo referente a la balanza fiscal, el sector ha sido contribuidor fiscal neto. En el año 2012, la diferencia entre los impuestos pagados y las subvenciones recibidas fue de 569 millones de euros.
Asimismo, hay que destacar que el de las renovables es un sector muy innovador. La inversión en I+D+i respecto al PIB alcanzó en 2012 el 4,23%, más del doble que la media europea, 2,03%, y más del triple que la media española, 1,30%.
Mayor producción y MW eléctricos
Las energías renovables del Régimen Especial generaron el 25,7% de la electricidad en 2012. Si contabilizamos las renovables de régimen ordinario, el porcentaje ascendió al 30,3%. En el ejercicio anterior, estas mismas cifras representaron el 22,2% y el 29,7%, respectivamente.
La capacidad total de las energías renovables en Régimen Especial, en términos de potencia instalada, era de 31.980 MW a 31 de diciembre de 2012. La eólica, con 22.622 MW, era la tecnología con más MW instalados y representó el 70,7% del total de las renovables. Por Comunidades Autónomas, Castilla y León, Andalucía, Castilla-La Mancha y Galicia son, por este orden, las comunidades con mayor potencia instalada renovable.
Renovables, déficit de tarifa y ahorros en el pool
El Estudio desmonta algunas de las acusaciones que se realizan sobre las energías renovables. La comparación interesada entre primas y déficit tarifario olvida los múltiples beneficios que tienen las energías renovables en nuestra economía y que deben tenerse en cuenta en un análisis económico de sus impactos. Las renovables no sólo no han sido las causantes del déficit tarifario sino que lo han reducido.
Durante 2012, el Sector produjo unos ahorros al sistema eléctrico de 6.756 millones de euros (ahorro en importaciones, ahorro por reducción de emisiones de CO2 y ahorros por reducción del precio del pool), superiores en 620 millones a las primas que recibieron por su generación de electricidad.
Las primas recibidas por las renovables en 2012 ascendieron a 6.136 millones de euros, un 22% mayor que en 2011, debido a la entrada en funcionamiento de nuevas instalaciones y, por tanto, a una mayor generación renovable. Del mismo modo, un menor precio del mercado eléctrico durante 2012 –paradójicamente como resultado en gran medida de la entrada en el mismo de la generación renovable- ha contribuido de forma directa al incremento de las primas.
En cuanto a los ahorros por reducción del precio del pool, los resultados del Estudio alumbran que las energías renovables abarataron en 2012 el precio del mercado diario de OMIE en 4.056 millones de euros. Esta cantidad supuso un ahorro de 18,12 euros por cada MWh adquirido en el mercado diario.
Las energías renovables son un gran negocio para España
El peso de las energías renovables dentro del PIB nacional, que alcanzó en el 2012 su máximo histórico con una aportación del 1%, consolida al Sector como dinamizador de la economía española y que debería ser una de las bases sobre la que construir nuestra recuperación económica. Sin embargo, en el año 2013, el paquete de medidas diseñado por el Gobierno como “reforma eléctrica” va en una dirección absolutamente contraria al desarrollo de las energías renovables, en línea con las regulaciones de años anteriores.
Esta situación ha puesto en marcha un proceso de desmantelamiento de un sector que hasta hace poco ocupaba una posición de liderazgo mundial. Es necesario que el Sector recupere pronto un marco regulatorio estable que acabe con la incertidumbre y detenga el deterioro del tejido industrial e inversor creado en torno a las energías renovables. De no ser así, se corre el riesgo de que España se aleje cada vez más de cumplir sus objetivos a 2020 de consumo de energía con fuentes renovables, lo que podría llevar a la situación de que, llegado el momento, tengan que cumplirse con equipos y componentes importados.
Cumplimiento de objetivos
Hasta 2012 no se ha alcanzado el objetivo de nuestro país previsto para 2010, es decir, con dos años de retraso, de llegar a un consumo total de energía primaria del 12% proveniente de fuentes de energías renovables, fijado en la Ley 54/1997 del Sector Eléctrico. En concreto, el año pasado, las energías renovables representaron el 12,2% del consumo total de energía primaria en España, seis décimas más que en el año anterior.
Respecto al objetivo establecido para España en la Directiva Europea 2009/28/CE de alcanzar el 20% de consumo final bruto de energía en el año 2020, las energías renovables representaron el 16,2% del total de energía final bruta consumida en España en el año 2012, lo que supone un aumento de tres décimas respecto a 2011.
En el ámbito de los biocombustibles, el objetivo global de venta o consumo de biocarburantes en gasolinas y gasóleos fijado para 2012 (6,5%) se superó ampliamente en términos reales, dado que los biocarburantes puestos físicamente en el mercado español alcanzaron una cuota del 8,5%. De igual manera, se superó el objetivo específico anual de biocarburantes en gasóleo (7,0%), al llegar éstos a una cuota real de mercado del 9,5%, gracias en gran parte a la contribución del hidrobiodiésel. El objetivo específico anual de biocarburantes en gasolinas (4,1%) se cumplió de manera exacta con el bioetanol consumido.