Castilla-La Mancha se marca como “el mayor reto” tras la reelección este viernes 22 del presidente regional, Emiliano García-Page, como presidente de la Asamblea de Regiones Europeas Vitícolas (AREV), trabajar para que en las negociaciones de la reforma de la Política Agrícola Común (PAC) para el periodo 2021-2027 se “refleje bien el papel del vino”.
Así lo ha puesto de manifiesto el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, durante la Asamblea de la AREV en la localidad austriaca de Hainburg an der Donau, donde ha estado acompañando al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que ha sido elegido como presidente hasta el año 2020, en un congreso en el que, además, se celebran los 30 años de la creación de esta institución.
Martínez Arroyo ha destacado que, unido a que el papel del vino quede perfectamente reflejado en la nueva PAC, hay que “cuidar” otras cuestiones de importancia para el sector que “para nosotros son fundamentales”, como son el etiquetado de los productos que finalmente llegan a los consumidores.
Durante sus declaraciones a los medios de comunicación, el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, ha realizado un balance positivo de este último año en el que Castilla-La Mancha ha ostentado la Presidencia la Asociación de Regiones Europeas Vitícolas en un momento “en el que se encontraba en una situación de mucha dificultad” y ante la cual “Castilla-La Mancha arrimó el hombro en un momento en el que era más necesario que nunca”.
“El presidente Emiliano García-Page ha hecho una labor muy importante de difusión de los valores de la AREV en otras regiones”, ha explicado Martínez Arroyo quien ha destacado, también, que en estos últimos meses se han conseguido tres nuevas incorporaciones a la Asamblea de Regiones Europeas Vitícolas, una de ellas española, como es la Comunidad Valenciana. En esta línea, ha adelantado, se va a seguir trabajando en los próximos dos años.
Además, uno de los logros de este último año, ha pasado porque la Asociación de Regiones Europeas Vitícolas cuente ya con su sede en Bruselas que es, ha recodado, “donde están las instituciones europeas” y más sentido tiene una institución como ésta.