La cosecha de cereal de invierno (como trigo o cebada) en España será de 9,5 millones de toneladas en 2017, un 50% inferior a la del año pasado, debido a la sequía, según las estimaciones difundidas este viernes 12 por la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja).
Los aforos de Asaja, realizados antes de las lluvias registradas esta semana, indican que Castilla y León -primera autonomía productora, con la mitad de la cosecha del país-, registrará las mayores pérdidas, con mermas que oscilan entre el 50 y el 80%.
Con una superficie sembrada similar a la de 2016, unos 5,7 millones de hectáreas, las variaciones respecto a las previsiones de producción son «enormes» y oscilan entre una bajada del 15% en Cataluña hasta el 100% en comarcas de Palencia, Valladolid, Ávila, Badajoz o Toledo.
El pronóstico meteorológico para este mes, sin lluvias y temperaturas más altas de lo normal, no contribuye a aliviar la situación
Extremadura, Castilla-La Mancha, Madrid, Aragón y el resto de Castilla y León registran pérdidas entre el 30 y el 70%, según comarcas.
Asaja ha añadido que las lluvias registradas en los últimos días han sido muy «desiguales» debido a su carácter tormentoso y en la mayoría de los casos de escaso volumen, por lo que su incidencia en la evolución de la cosecha de cereal de invierno solo es importante en la mitad sur peninsular.
Cataluña es la zona productora menos afectada por la falta de precipitaciones, con daños que no superan el 15%, seguida de Andalucía que registra mermas entre el 15 y el 30%, siendo las siembras tempranas las que soportan «daños irreversibles», ha precisado Asaja.
El pronóstico meteorológico para las próximas tres semanas es de ausencia de precipitaciones significativas y de temperaturas más altas de lo normal para estas fechas, lo que a juicio de la organización no contribuye a aliviar la situación, sino que probablemente se agrave aún mas hasta el comienzo de cosecha de cereal de invierno.
Según sus datos, el índice de aseguramiento en los cereales de invierno apenas llega al 40% de las parcelas y sólo 1,99 millones de hectáreas sembradas tienen cubierto el riesgo de sequía.
En este sentido, Asaja ha reclamado al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente la revisión de las condiciones de aseguramiento, especialmente en las zonas donde la contratación es baja.
Además, ha pedido a Agroseguro que acelere al máximo las tareas de peritación de los cultivos afectados, así como la «máxima diligencia» a la hora de hacer frente a las indemnizaciones.