Por especies varietales destacan con 87,5 millones de euros las naranjas, cuya variedad más afectada con creces resulta la Navelina y en mandarinas con 37,5 millones de euros las pérdidas se centran fundamentalmente en la variedad Clemenules.
Los citricultores afectados han visto cómo los precios que reciben por su fruta, en el mejor de los casos, oscilan entre los 5 y los 12 céntimos de euro por kilo en naranjas y clementinas.
La Unió considera urgente que tanto la Conselleria como el Ministerio de Agricultura, "principales culpables por acción u omisión de esta situación catastrófica se pongan a trabajar en serio y haga políticas adecuadas que favorezcan a los agricultores y no a unos pocos lobbies que solo representan a cuatro y que arruinan al campo valenciano".
"Hay una pasividad total de los poderes públicos que miran hacia todos los lados menos para donde deberían de mirar, que es evitar la muerte de la agricultura en general y en concreto de la citricultura valenciana", han añadido las mismas fuentes, que denuncian que "no ha habido en los últimos años ni una sola reunión entre el sector y la Conselleria de Agricultura para analizar la situación de las diversas campañas citrícolas".