Presidente y gerente de COEXPHAL, Juan Antonio González y Luis Miguel Fernández, respectivamente, mantuvieron el pasado viernes un encuentro con responsables de la Junta de Andalucía, entre ellos, la delegada del Gobierno, Aránzazu Martín, y la consejera de Agricultura, Carmen Crespo, así como, el director general de producción Agrícola y Ganadera, Manuel Gómez, y el delegado territorial de Agricultura, Antonio Mena, a los que trasladaron la extrema situación que atraviesa el sector productor y comercializador de frutas y hortalizas. La Asociación considera urgentes una serie de cuestiones que han puesto sobre la mesa en este encuentro y de los cuáles se necesita solución inmediata para el futuro de la horticultura provincial, al considerar que las nuevas normativas burocratizan la actividad hortofrutícola restando agilidad y encareciendo los costes.
Para COEXPHAL en cuestiones como la del agua se debe actuar ya. “Necesitamos garantizar su disponibilidad, en cantidad y calidad, así como su legalidad. Hay que utilizar todas las infraestructuras posibles: desaladoras, embalses, trasvases, etc. No puede haber desaladoras o depuradoras infrautilizadas, pendientes de concesión o de permisos administrativos. Estamos muy contentos y felicitamos a la Junta de Andalucía por la aprobación de las obras recogidas en los cuatro decretos de sequía aprobados hasta la fecha. Lo que urge es su ejecución lo antes posible porque ya vamos muy tarde”, ha expuesto Luis Miguel Fernández, gerente de COEXPHAL.
“Creemos que los poderes públicos deberían facilitar un precio más asequible para el agricultor, desvinculando el precio del agua de la energía para desalarla; o minimizando el beneficio de la energía necesaria para desalar. De la misma forma que hay un gasóleo agrícola bonificado, solicitamos un agua más barata”, ha añadido.
En cuanto a los Programas Operativos, herramientas fundamentales para que avance el sector, ven que es preciso que haya más agilidad a la hora de la justificación de los programas. Además, es necesario que los proyectos de I+D+i en los Programas Operativos puedan incluir proyectos de mejora y eficiencia en las centrales hortofrutícolas para la digitalización, automatización y gestión eficiente de las líneas de manipulado, enfriado, etc.
“ES IMPORTANTE QUE LA ALIMENTACIÓN ESTÉ EN NUESTRAS MANOS Y NO DEPENDA DE PAÍSES DE FUERA DE LA UNIÓN EUROPEA”
Por otro lado, COEXPHAL, como ha denunciado reiteradamente, considera que la excesiva burocratización a la que están sometidos productores y empresas de comercialización es inviable e inciden directamente en la rentabilidad y continuidad de la actividad agrícola.
“Los trámites burocráticos nos restan agilidad y encarecen los costes de operación de las comercializadoras. El Cuaderno de Campo, los contratos de la Ley de la Cadena Alimentaria, el DAT, los nuevos requisitos de subvencionalidad que se han incorporado recientemente suponen una carga administrativa importante, con un coste operativo que está teniendo consecuencias críticas y que se deberían simplificar por parte de la Administración autonómica”, ha afirmado Fernández.
Por otro lado, COEXPHAL explicó que el sector de frutas y hortalizas es muy competitivo, vive del mercado y no de las subvenciones, Por este motivo es tan sensible a la competencia desleal de productos de terceros países. La PAC actual ha venido a restar cuota de mercado a las frutas y hortalizas europeas/españolas. Su estrategia “Del campo a la mesa” ha sido un fracaso, ya que han restado competitividad frente a producciones terceras, ha encarecido los costes y está disminuyendo las herramientas fitosanitarias y de fertiirrigación en un porcentaje altísimo con la consiguiente bajada de productividad.
Como resultado, lamentan que «en el punto de venta al público, se ha encarecido el producto y la demanda europea prefiere las frutas y hortalizas más baratas de terceros países, aunque sean sin garantías sanitarias. Hay que señalar que, en 2023, más de 500 notificaciones de alertas sanitarias tenían como protagonistas los productos de Turquía y Marruecos».
En este sentido, recuerdan que en su día se perdió el cultivo de judía, y ahora vemos que está ocurriendo lo mismo con el melón y con el tomate. Marruecos ya vende más tomate que Almería en el mercado europeo. Y otros productos cooperativos como los frutos rojos, el calabacín, la sandía, presentan la misma tendencia.
Ante esta situación “desde COEXPHAL reivindicamos el principio de preferencia comunitaria para proteger el producto europeo, de manera que se garantice la soberanía alimentaria de la UE. Esta idea hay que trabajarla desde que se constituya el próximo Parlamento Europeo, para que incluya como estrategia en el diseño de la nueva PAC y que los primeros borradores de los Reglamentos ya incorporen estos principios. Es importante que la alimentación esté en nuestras manos y no dependa de países de fuera de la Unión Europea” ha afirmado Luis Miguel Fernández.