Las denominadas ‘mafias de las setas’ no sólo siguen campando libremente por los montes de Castilla y León arrasando todo lo que encuentran a su paso, sino que ahora han conseguido enfrentar a los agentes medioambientales, que piden medidas para poder enfrentarse a ellas, y la Administración regional, que considera que no deben intervenir.
Así, el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha recordado este lunes 19 que los agentes medioambientales no deben asumir ningún riesgo en materia de vigilancia en la recolección de setas, ya que las detenciones en esos casos corresponden al Seprona de la Guardia Civil.
El consejero se ha referido así, en declaraciones a los periodistas, a la denuncia que ha realizado la Asociación de Profesionales de Agentes Medioambientales de Castilla y León (Apamcyl) sobre el riesgo que supone para su integridad física las labores de vigilancia en la recolección de setas en la Comunidad, donde ejercen como policía medioambiental aunque sin medios de defensa para actuar ante estas ‘mafias de las setas’.
El consejero ha insistido en que los agentes no deben asumir ningún riesgo y deben «avisar» a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. Asimimso, Suárez-Quiñones ha valorado «la extraordinaria labor» de los agentes medioambientales, muy solitaria.
La tensión vivida en Zamora ha provocado el enfado y lapreocupación de los agentes ambientales
A través de un comunicado, Apamcyl se ha referido en concreto al caso de inseguridad que se ha producido en Zamora a raíz de los aprovechamientos de setas en determinadas comarcas de la provincia.
La asociación ha recordado que «otros años ha sido la provincia de Soria la que se ha llevado las portadas en medios de comunicación en cuanto a la afluencia de recolectores foráneos en busca de un producto cuyo valor de mercado les proporciona un jornal».
Este año «la escasez de producción en esta provincia trasladó el problema durante la última quincena de noviembre a la provincia de Zamora, donde, en torno a 150-180 personas originarias de países del este han estado recolectando en las comarcas de Aliste y Villardeciervos», entre otras
La asociación ha recordado que desde 2013, la Junta, a instancias de la intervención de armas y explosivos de la Guardia Civil, ha retirado progresivamente las pocas armas cortas de defensa en todas las provincias de la región, con las que contaba este colectivo de funcionarios, «agentes de la autoridad, que fueron transferidos desde el Estado como Cuerpo Armado, herederos del Cuerpo de Guardería Forestal del Estado».
Se trata de intervenciones, las de los agentes medioambientales, que «los propios agentes de la Guardia Civil han calificado de peligrosas, donde en ocasiones se han detenido a individuos con antecedentes penales o buscados por Interpol», según las fuentes.
Por ello, desde Apamcyl han pedido al consejero de Medio Ambiente que reflexione sobre la problemática de este y otro tipo de servicios donde los agentes medioambientales de su Consejería «se enfrentan a ciudadanos armados con la única defensa de la palabra, un bolígrafo y una libreta» y esa no es forma de combatir a las llamadas mafias de las setas’.
(Fotos: Archivo)