La presidenta de la Federación de la Mujer Rural (Femur), Juana Borrego, ha celebrado hoy en Segovia un desayuno informativo para hablar de los trabajos en los que la mujer está sub-representada en el medio rural en el que han participado cinco empresarias para analizar sus dificultades y evolución.
Con este encuentro, Femur ha pretendido establecer las conclusiones y proponer medidas para mejorar la vida de la mujer rural.
La Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural (Amfar) ha organizado actos en diez provincias para dar a conocer sus reivindicaciones que, según su presidenta, Lola Merino, "se centran en esta ocasión en dos aspectos fundamentales, formación y empleo".
Asimismo, desde Amfar se ha pedido que la mujer sea la protagonista del nuevo modelo de programación para las políticas de desarrollo rural, ya que es una de las claves para alcanzar los objetivos prioritarios como mantener el nivel de vida de la población, favorecer el relevo generacional o diversificar la actividad económica.
La Confederación de Mujeres del Mundo Rural (Ceres) ha señalado que 200.000 mujeres se emplean en el sector agrario español, si bien "los drásticos recortes en servicios e infraestructuras dificultan que la fuerza laboral de la mujer desarrolle todo su potencial".
La presidenta de Ceres, Inmaculada Idáñez, ha indicado además que se sigue trabajando para que los beneficios de la Ley de Titularidad Compartida de las Explotaciones Agrarias, en vigor desde hace más de un año, tenga un reflejo en la realidad, así como para potenciar la calidad de los servicios e infraestructuras de los pueblos.
Por su parte, la Federación de la Asociación de Mujeres Rurales (Fademur) ha exigido "no dar marcha atrás en los avances conseguidos en las políticas de igualdad entre mujeres y hombres en los últimos años".
Por ello, ha pedido que se frene lo que a su juicio es el "desmantelamiento de servicios públicos esenciales del medio rural" entre los que ha citado ambulatorios, colegios, guarderías, comedores o rutas escolares.
Cooperativas Agro-alimentarias ha aprovechado el 8 de marzo para recordar que solo el 3,8 % de los miembros de los consejos rectores de este tipo de entidades son mujeres debido a su alto grado de masculinización, ya que tres de cada cuatro asociados son hombres.
Esta realidad tiene su origen, según Cooperativas, en la configuración estructural de las explotaciones en las que sólo el 30 % de las mujeres son titulares de las mismas y que, además, según incrementa la cifra de negocios disminuye el porcentaje de mujeres.