EFE.-Los núcleos urbanos emiten entre un 60 y un 80% de las emisiones de gases de CO2 de todo el mundo, convirtiéndose en grandes focos del problema del cambio climático. Ahora, un grupo de investigadores aborda las posibles soluciones que las urbes pueden aportar al calentamiento global.
"El problema que tienen las ciudades para combatir el cambio climático es que no tienen obligaciones desde el contexto internacional que les obliguen a reducir los gases que generan", afirma a EFEverde la Investigadora del Real Instituo Elcano, Lara Lázaro Touza, que ha participado en numerosos estudios sobre cambio climático.
Ésta es una de las conclusiones que se ha extraído del primer Workshop de Ciudades y Cambio Climático, celebrado recientemente en Madrid gracias al Instituto Internacional de Investigaciones Avanzadas de la Universidad estadounidense de Brown (BIARI).
Para Lázaro Touza, hay que pensar en soluciones eficientes y ahorrativas, que sean efectivas a nivel ambiental, y que se ajusten al tamaño de la institución que tiene que gestionarlas, y propone el aumento de tejados reflectantes o el de la frecuencia del transporte público entre zonas urbanas como principales medidas.
La mitad de la población mundial vive en entornos urbanizados, una cifra que aumenta a casi el 80% en países desarrollados, convirtiéndose así estas zonas en grandes focos del problema del cambio global.
"El cambio climático es un fenómenos global, pero uno tiene que enfrentarse a él desde el punto de vista local. Los países pueden dar indicaciones generales, pero los planes los tienen que hacer los municipios", indica a EFEverde la representante del Obsertorio del Agua de la Fundación Botín, Elena López-Gunn.
En el contexto español, Madrid está llevando a cabo desde 2008 el Plan de Uso Sostenible de la Energía y Prevención del Cambio Climático.
"Madrid está muy bien posicionada porque tiene un plan bastante sofisticado de mitigación y de adaptación que ha sabido unir al tema de la calidad del aire", afirma López-Gunn.
Las acciones que está llevando a cabo la capital española parecen encaminadas en la buena dirección, como también asegura Lara Lázaro Touza, quien señala que el crecimiento de las emisiones no han sido tan elevados en Madrid como lo ha sido su crecimiento económico.
En Europa, sin embargo, la mayor parte de las ciudades son de tamaño mediano, lo que origina un problema de capacidad a la hora de abordar planes contra el cambio climático, según indica a EFEverde el profesor de Planificación Ambiental de la IUAV de Venecia, Francesco Musco.
"La ciudad mediana y pequeña no tiene todas las competencias técnicas para hacer un plan contra el cambio climático", afirma el profesor italiano.
Para Musco, una iniciativa interesante es la que se ha creado con el Pacto de los Alcaldes, un convenio de la Unión Europea para llevar a cabo políticas energéticas que permitan disminuir las emisiones de dióxido de carbono.
A través del Pacto de los Alcaldes, se pretenden crear intercambios de experiencias entre ciudades de las mismas características y crear pactos entre partidos políticos que lleven a la realización de planes ambientales al margen de los cambios políticos que se produzcan en las instituciones locales.