La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos ha lanzado un nuevo proyecto que analizará y visibilizará el papel que juega el modelo familiar de producción de alimentos en la consecución de los objetivos de la Agenda 2030 y del Pacto Verde Europeo. UPA asegura que la agricultura familiar sostenible juega un papel imprescindible para lograr una transición ecológica y social justa ante los objetivos y acciones contemplados en la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible y el Pacto Verde Europeo.
UPA lanza este proyecto motivada por la necesidad de poner en valor la labor que realizan las explotaciones pequeñas y medianas y de carácter familiar, que va mucho más allá de la producción de alimentos. La gestión del territorio, la sostenibilidad ambiental, la vitalidad de los pueblos, el mantenimiento del patrimonio cultural inmaterial y la conservación de los recursos naturales son tareas que se desarrollan día a día desde la agricultura y ganadería familiar.
El proyecto de UPA realizará numerosas acciones en hasta diez comunidades autónomas y se centrará especialmente en los sectores de la ganadería extensiva y la producción ecológica. Por un lado, visibilizará la Agricultura Familiar como una pieza clave en la transición del sector agroalimentario que se persigue tanto en la Agenda 2030 como en el Pacto Verde Europeo. Por otro, estudiará cómo dirigir los apoyos para mantener una rentabilidad que asegure la viabilidad de estas explotaciones familiares. También explicará a los agricultores y ganaderos las posibilidades y oportunidades que pueden ofrecer la Agenda 2030 y el Pacto Verde para la agricultura familiar.
La Agenda 2030 y el Pacto Verde han sido objetivo de fuertes campañas de desinformación que han intoxicado a los profesionales del sector primario. Con su nuevo proyecto, UPA pretende hacer frente a la falta de información y los bulos que, con diversas intenciones, ha proliferado en relación a la Agenda 2030 y al Pacto Verde Europeo en el sector agrario.
TRES ÁMBITOS PRINCIPALES
El proyecto se centrará tres ámbitos principales de actuación. El primero de ellos será el de la producción ecológica, sistema al que se acogen numerosas explotaciones familiares, que juegan un papel clave en la consecución del objetivo de llegar a un 25% de superficie ecológica en 2030. El siguiente ámbito será el de la agricultura y ganadería familiar en espacios protegidos.
Estas áreas ocupan actualmente el 37% del territorio terrestre en España. Gran parte de esta superficie está gestionada con actividades agrícolas y ganaderas, pero también hay mucha coincidencia de estas áreas, son zonas con gran despoblamiento o en proceso acelerado a él, con agricultores y ganaderos de edad avanzada y con problemas de relevo generacional, y con producciones muchas veces con problemas de competitividad y escasa rentabilidad.
Sin embargo, gran parte de esta riqueza natural que albergan dichos espacios, es debida a la gestión sostenible y tradicional que han venido ejerciendo los agricultores y ganaderos durante mucho tiempo.
El tercer ámbito es el de la ganadería extensiva gestionada por explotaciones ganaderas familiares, un modelo que requiere de mucho más apoyo para garantizar su futuro. Aspectos como la conservación y mantenimiento de los prados y pastizales son cruciales, no sólo desde el punto de vista de la biodiversidad, sino también como prevención ante los incendios forestales.
El proyecto, para el que UPA colaborará con la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (FADEMUR), con WWF España y con la Sociedad Española de Agricultura Ecológica y Agroecología (SEAE), cuenta con la financiación de la European Climate Foundation (Fundación Europea para el Clima) y se desarrollará hasta final de este año 2025.
No es posible amar ni desamar a un tiempo, ni juntar en un solo verso, el cuchillo y la paloma.
La agricultura y ganadería familiar es esencial, la cercana, la auténtica, la genuina. Es libre, es heredera, es espina dorsal del mundo rural, la que garantiza la hegemonía alimentaria y la que nutre. Es sobre todo diversa y heterogénea, adaptada al terruño de cualquier rincón.
La Agenda 2030 no debería ir acompañada de lo familiar, ni su Pacto Verde. Absolutamente todo se puede defender pero esto no es compatible con el mundo rural ni con la familia.
¿ Quién no quiere acabar con el hambre en el mundo? ¿ Quién no quiere igualdad ? Y el acceso al agua? Es muy loable y estos fines deben ser buscados, por supuesto, faltaría más!
Pero esta agenda no es amiga ni mía, ni de nadie que conozco, ni de la tierra, las familias, ni de la hegemonía alimentaria, ni del autoconsumo, ni del futuro.
Estoy deseando ver sus razones para defender algo tan dañino para las personas y el Medio.
Mientras sigáis sin alzar la voz ante el intento de registrar las gallinas en una familia, mientras sigáis poniendo leyes y más leyes que desde un pequeño o mediano agricultor ( sin los recursos que tienen las grandes empresas para hacer frente a burocracia u otros menesteres) los intentáis comparar con los grandes en cumplir los mismos requisitos legales, mientras en sequías sigáis castigando de forma criminal al agricultor impidiendo sembrar sus tierras, mientras abrís los brazos al turismo desbocado y sediento, mientras tengáis otra vez en la boca el metano de las vacas y no sois capaces de mirar arriba a los aviones y denunciar esos gases que a 10 kilómetros de altura ahogan los escasos gases ya con su hollín, CO2, metales pesados , el óxido nitroso, el ozono troposférico nocivo para salud y sobre todo su vapor de agua reaccionario( el más potente de todos los gases de efecto invernadero), mientras se sigan haciendo leyes para disuadir el cumplir con tradiciones o el autoconsumo, mientras se quiera modelar la diversidad cultural pero también la propia en pro del globalismo. Mientras tengáis una pequeña duda si defender al pequeño frente al grande, si debería dar una ayuda al que produce en ecológico, mientras la prioridad sea la cantidad y no la calidad del producto, mientras sigáis sin incorporar en la ecuación de subvención al consumidor y empezar a cuidarlo de verdad, mientras se quiera dirigir a la población hacia lo digital y alejarla de lo orgánico y la naturaleza, mientras siga esa Agenda 2030 con esas ideas y vosotros la intentéis abrazar con esas utopías estériles y vacías, me tendréis en frente y no como ideología sino por amor a lo real.
Mi opinión, como siempre. Pienso que el consumidor debería tener derecho a una alimentación sana, pienso que el pequeño agricultor o ganadero debería tener el reconocimiento de otros sectores reconocidos para poder jubilarse a edades más tempranas debido a su profesión. Pienso que si quieren hacer desaparecer al pequeño, deberían desaparecer los ayuntamientos y sus concejales en la misma proporción y que nos gobiernen desde Bruselas porque saben lo que nosotros necesitamos…, pienso que si perdemos la identidad, podemos pasar perfectamente por ovejas.
Pero estoy deseando leer vuestro argumento, faltaría más!