Para la organización agraria, los Planes de Desarrollo Rural son el marco financiero en el que se programan ayudas de gran transcendencia para la mejora estructural de las explotaciones agrarias (incorporación de jóvenes, regadíos, planes de mejora), su sostenibilidad ambiental (agricultura ecológica, reforestación, medidas agroambientales), competitividad agroalimentaria (mejora de las condiciones de transformación y comercialización) y desarrollo rural (programa LEADER).
Por este motivo, la pérdida de los fondos comunitarios del FEADER, que según regiones y medidas pueden aportar hasta el 75% del coste de la medida, "es particularmente grave, teniendo en cuenta que se necesita una proporción mucho menor de inversión del Estado miembro para captarlas".
Reclama que el trasvase de fondos entre CCAA funcione "efizcamente"
Por eso, la Unión de Uniones considera necesario que el mecanismo propuesto en el período de programación 2014/2020 para trasvasar fondos no utilizados por parte de algunas Comunidades Autónomas a otras en donde haya mayor demanda "funcione eficazmente".
No obstante, la organización también reclama de las Comunidades Autónomas a las que se asignan inicialmente los fondos, "una mayor responsabilidad" a la hora de ejecutar estos programas y una atención prioritaria a las necesidades de su sector agrario y medio rural “porque con la caída de renta que hemos sufrido los agricultores y ganaderos el año pasado”, ha subrayado José Manuel de las Heras, Coordinador Estatal de la Unión de Uniones, “no es admisible el repetido desaprovechamiento de los recursos europeos”.