Los ministros de Agricultura de la Unión Europea debatieron este martes 7 los principales retos de las zonas rurales, incluida la despoblación o las malas comunicaciones, en el contexto de la visión a largo plazo de Bruselas para la Europa rura y lograr redefinir su papel social.

El asunto se trató en una reunión informal organizada en Liubliana por la presidencia de turno del Consejo de la Unión Europea, en manos de Eslovenia.

«Todos estamos de acuerdo en que las zonas rurales deben acercarse más a las urbanas» en términos de infraestructuras, conectividad, salud, educación cultura y otros ámbitos, dijo al término de la reunión en rueda de prensa el ministro de Agricultura esloveno, Jozé Podgorsek.

El comisario europeo de esa cartera, Janusz Wojciechowski, recordó por su parte que en solo una década la UE ha perdido 4 millones de agricultores y opinó que se deben poner a disposición tanto los fondos de cohesión como de recuperación para ayudar a las zonas rurales.

Por su parte, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas,, subrayó este martes ante sus homólogos europeos que los retos que afrontan las zonas rurales son comunes en toda Europa y deben tener una respuesta política no solo desde programas agrícolas, sino de todo el espectro de fondos y actuaciones.

En declaraciones telefónicas a Efe desde la reunión en Eslovenia, Planas recalcó que las zonas rurales y el campo -en España un 85 % del territorio en el que vive un 20 % de los ciudadanos- requieren medidas también en las áreas de transporte, sanidad y educación para desarrollarse en una armonía «territorial, social y económica».

El titular francés, Julien Denormandie, señaló hoy a su llegada a la reunión que hay que buscar vínculos entre las áreas urbanas y rurales, ya que a veces esas zonas, que son interdependientes, «no se comprenden lo suficiente e incluso se caricaturizan».

Según una amplia consulta pública a la que se refiere en un documento de trabajo que debatieron los ministros, «el papel de las zonas rurales a menudo se infravalora» y el 40 % de su población se siente desatendida por las políticas públicas.

«Es necesario encontrar un camino, redefinir el papel social de las zonas rurales y, al mismo tiempo, apoyar la diversidad y calidad de estas áreas», dice el texto, que cree necesario «un nuevo enfoque para comprender el papel de las zonas rurales y las políticas públicas para abordar estos desafíos».

Entre otros desafíos están las diferencias entre ellas; por ejemplo, mientras muchas están experimentando una disminución de la población, otras están más sometidas a una creciente presión urbanística.