La primera campaña de prevención de incendios por pelusa de chopo ha demostrado que minimiza este riesgo, ya que este año se ha reducido la superficie quemada a 0,007 hectáreas, frente a las 18 hectáreas afectadas en 2015.
Las labores de prevención promovidas por el Gobierno de Navarra, en colaboración con la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona y el Ayuntamiento de Pamplona, se han centrado en regar las zonas de acumulación y precintar las áreas recreativas de riesgo a lo largo del Paseo del Arga.
Según datos del Guarderío Forestal de Pamplona, dependiente del Ejecutivo foral, desde que en junio pasado comenzaron las tareas de refresco de las zonas de riesgo, sólo ha habido dos conatos, que han afectado únicamente a 70 metros cuadrados de vegetación de ribera (zarzas, sauces y fresnos).
la pelusa de chopo es un material altamente inflamable, capaz de originar incendios con un pequeño foco de calor
A la vista de estos resultados positivos, para el año próximo se ha propuesto ampliar este plan con un proyecto de educación ambiental y extenderlo a otras zonas de la Comunidad Foral, según ha avanzado el Ejecutivo en una nota.
Por el contrario, durante la primavera del pasado año 2015 se produjeron 30 incendios por inflamabilidad de pelusas, que afectaron a una superficie de 18 hectáreas, de los que 22 de ellos ocurrieron en el entorno del Paseo del Arga, afectando a los municipios de Ezkabarte, Huarte, Villava, Burlada, Pamplona, Barañáin y Cizur.
Las mismas fuentes explican que la pelusa de chopo es un material altamente inflamable, capaz de originar incendios con un pequeño foco de calor.
Por ello, el Gobierno de Navarra promovió por primera vez la pasada primavera una campaña preventiva centrada en regar las zonas de acumulación de este elemento y en precintar las áreas recreativas de riesgo (asadores, barbacoas) a la largo del Paseo del Arga.