Ciolos se refirió asimismo a la necesidad de dar a los productores "lo antes posible una señal clara y definitiva" sobre las normas que se aplicarán en los próximos meses, para que puedan planificar su producción.
Los países más productores quieren acabar ya con el régimen de cuotas
Un grupo de Estados miembros encabezados por Austria, y entre los que figuraban también Alemania, Dinamarca, Irlanda y Holanda, pedían poder empezar a producir más en esta última campaña sometida al régimen de cuotas, pero evitando o reduciendo el pago de una supertasa, penalización que se impone en caso de rebasar las cuotas.
Esos países argumentan que hay buenas perspectivas de mercado de cara a los próximos meses y no quieren tener que esperar hasta abril del próximo año para poder aplicar el nuevo régimen.
Para ello, apuestan por la corrección del coeficiente de materia grasa, algo que en la práctica permitiría producir un poco más sin superar las cuotas actuales.
En el extremo opuesto, Francia, Reino Unido, Italia y Portugal, entre otros, son partidarios de respetar las reglas vigentes, incluidas las normas sobre la supertasa. España presentó una propuesta para intentar acercar posiciones, según fuentes europeas.
El informe de la UE refleja dudas sobre la capacidad de responder al fin de la cuotas
Durante la reunión, el comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, presentó un informe que pasa revista a la situación del mercado y al conjunto de medidas conocido como "paquete lácteo", adoptado en 2012.
Pese a ofrecer una visión general positiva de los mercados mundiales de la leche y destacar las oportunidades de crecimiento de los próximos años, el informe refleja dudas sobre la capacidad de las normas europeas de responder a una inestabilidad extrema de los precios o una crisis tras la supresión de las cuotas.
El Ejecutivo comunitario indica que tiene previsto seguir debatiendo las preocupaciones del sector y que explorará "la necesidad y el alcance de herramientas adicionales para anticipar mejor las situaciones de crisis y afrontar y la volatilidad de los precios".
Además, considera que hace falta un análisis en profundidad "que permita encontrar maneras más eficientes de apoyar al sector lácteo" para ayudar a una mayor competitividad y a la sostenibilidad del suministro de leche en la UE, después de treinta años de cuotas lácteas.