A su juicio, la propuesta comunitaria supondría perder "un tiempo precioso" para investigar otros problemas que afectan actualmente a las poblaciones de abejas, como es el caso de parásitos como la varroa, mientras que se penalizaría unos fitosanitarios que "llevan años demostrando sus beneficios".
Según ha explicado, los neoniotinoides suponen un tratamiento "muy eficiente", gracias a su aplicación "de precisión" sobre las semillas, en lugar de pulverizados sobre el terreno de cultivo, lo que ofrece una protección a las plantas desde el inicio.
En la jornada celebrada han participado también representantes de agricultores, apicultores y centros de investigación.
El doctor Mariano Higes, asesor de investigación de la Junta de Castilla-La Mancha, ha destacado que la Comisión Europea debería reflexionar sobre las diferentes condiciones en que se desarrolla la apicultura del Sur de Europa, más profesionalizada, y en los países del Norte.
Ha destacado que según datos objetivos, avalados por investigaciones científicas, en los países del Sur los mayores peligros para las poblaciones de abejas son parásitos como la varroa y la nosema.
Por el contrario, ha añadido, los problemas asociados a pesticidas no son generalizados en España, debido a que las colmenas se sitúan en zonas con flora silvestre, a diferencia de otros lugares donde pueden estar en mayor contacto con áreas de agricultura intensiva.