En ese sentido, reconoció que en la asamblea que celebraron el miércoles por la noche los trabajadores, la plantilla se mostró "extremadamente preocupada por su futuro" y por la "escasa eficiencia de la Xunta de Galicia" para conseguir "la implicación de un socio industrial que garantice el reflote" de la empresa.

    Según López Carmona, incluso "trascendió en el sector" que "las distintas conversaciones llevadas a cabo por la Administración" en la búsqueda de un "posible socio industrial" pasaban "supuestamente por la liquidación de los puestos de trabajo actuales", y sin que se "tuviese claramente definido el futuro de la actividad en la factoría de Outeiro de Rei".

    Por otra parte, recordó que todavía resta por ver "qué posibles responsabilidades" puede tener la Xunta de Galicia en la marcha de esta empresa, dado que "vino tutelando su gestión" desde "hace más de un año".

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