EFE.- En declaraciones a Efe, Díez Holgado, explica que en San Gabriel, ubicado en La Aguilera (Burgos), llevan más de treinta años realizando un seguimiento diario de las precipitaciones, temperatura, humedad y otros parámetros climatológicos de la Ribera del Duero.

Según sus informes, en la última década "cada año ha sido diferente" y, aunque considera que todavía es pronto para sacar conclusiones sobre el cambio climático, reconoce que se han vivido situaciones "cambiantes" que hacen difícil hacer predicciones.

En este sentido, recuerda que 2011 fue, por ejemplo, el año más seco de la década en la Ribera del Duero pero en 20133 se recuperó la "normalidad" de las media de las estadísticas en la Ribera del Duero.

En este sentido, Díez Holgado recuerda que la temperatura media del pasado año fue de 11,8 grados con una evolución "normal" ya que hizo mucho calor en verano, con una máxima en agosto de 38 grados, y frío en invierno, bajando el termómetro en diciembre hasta 8 grados bajo cero.

Javier Díez Holgado señala que uno de los datos más importantes en la climatología de una zona de producción vitivinícola como la Ribera del Duero es el número de heladas, los días en los que el termómetro está bajo cero.

Durante los meses de enero y febrero del pasado año se registraron en la zona hasta 25 días con heladas y, tras el verano, en octubre ya se registraron las primeras temperaturas bajo cero.

El estudio también recogió en 2013 cifras mucho mayores que en años anteriores en el pluviómetro con 536 litros por metro cuadrado de media que, según explica Díez Holgado, están dentro de los parámetros normales de un clima mediterráneo continental.

El profesor de San Gabriel refiere que durante 2013 se vivieron estaciones "muy homogéneas" con una primavera bastante lluviosa y, como único dato "anómalo", las escasas precipitaciones del mes de noviembre.

A su juicio, todos estos datos permiten afirmar que 2013 "no se ha parecido a los últimos años" y supone una vuelta a la "normalidad" climatológica en la Ribera del Duero.

Sin embargo, el profesor indica que la dinámica atmosférica "siempre es caprichosa" y aunque en 2013 fue "austera", en su opinión y dada la tendencia de la última década, este balance "probablemente no se parezca tampoco a los venideros".

Javier Díez Holgado observa que esta climatología es una de las claves de la actividad vitivinícola de la Ribera del Duero cuyas viñas han sabido adaptarse a lo largo de los años, "con la ayuda y seguimiento de los profesionales" a estos cambios.

Por eso, incide en la importancia que la Ciudad de la Educación de San Gabriel da a continuar con el trabajo iniciado hace más de tres décadas por el hermano Salvador, fallecido en 2009.

×