En abril del 2014, el volumen de producción fue en el Estado un 7,9% superior al del mismo periodo del 2013, pero ante la advertencia, los ganaderos fueron conteniendo su producción, de forma que en diciembre del 2014 la producción acumulada de abril a diciembre fue sólo un 4,4% superior a la de la campaña anterior en el mismo periodo.
El estudio de simulación del FEGA también apunta que en noviembre del 2014 el 6,96% de los ganaderos del Estado (unos 1.248 productores) y el 6,29% de los ganaderos catalanes (unos 40 productores) ya habían agotado su cuota, y de estos, 387 de todo el Estado, entre los cuales 13 catalanes, ya habían producido leche por un volumen igual o superior al doble de su cuota.
El valor de la tasa láctea es de 27,83 euros por 100 kilos de leche, que se tendrá que pagar por el volumen sobrepasado que no pueda ser compensado por el volumen no producido (cuotas en manos de productores que no se han producido).
El cobro de la sanción no se hará afectivo hasta saber qué ganaderos deberán abonarlo
A pesar de que se preveía empezar a retener un 10% del valor de la sanción por cada kilo superado en la facturación de enero, este cobro se aplaza hasta que la campaña haya finalizado, cuando ya se sepa exactamente qué ganaderos tendrán que pagar y por qué volumen.
El precio medio de la leche pagada al productor en diciembre pasado en el Estado fue de 0,344 euros por litro, y en Cataluña de 0,369 euros por litro, según el mismo estudio.
UP lamenta que los ganaderos de leche se encuentren en estos momentos en una situación de tanta incertidumbre respecto a su futuro, puesto que sólo dos meses antes de que desaparezca el sistema de cuotas, a partir de abril del 2015, y por lo tanto, desaparezcan también las restricciones a la producción, tienen que estar pendientes de no sobrepasarse en el volumen.